Xico Martínez: en Perote te veré mi amor....
- Jorge Martínez
- hace 15 horas
- 94 Min. de lectura
93
Xico y Perote Ver. México a 14 de abril del 2025
Xico Martínez: en Perote te veré mi amor....
autor: Jorge Rafael Martínez Azuela
Dedicado:
A mi querida y afecta Tía Kiki, Aurora Cristina Martínez Morales, confidente, cómplice y amiga. Gracias, por tanto. Conociste México y el mundo como pocos y entregaste tu corazón a los cafetaleros del país. Siendo Veracruz y sus cafetales, los que vieron y gozaron tus mejores ideas, al promover un desarrollo social integral. Que tu Memoria sea Eterna. Te voy a extrañar. . .
A Andrés Manuel López Obrador, en el XX Aniversario del Desafuero. Nos mostraste, en tu amor a México, que, al escoger el camino institucional, para hacer llegar tus ideales a la Patria, este, fue el camino correcto. Al final tus palabras se infraestructura y buen gobierno. Y es el juicio de la historia el que te colocó en la altísima y trascendente dimensión histórica que te enaltece, y engrandece tu herencia política.
A Claudia Sheinbaum por dar continuidad al programa del Tren de Pasajeros de AMLO (Tren Maya e Interoceánico). Ahora serán los habitantes del occidente y norte de nuestro México, los beneficiados.
A Pedro Joaquín Coldwell y a Juan Carlos Zamorano Unanue. Hermanos, amigos leales, confidentes de una pieza y partícipes en aventuras muchas.
A los jornaleros del café, a ellos, sus familias, seres queridos y comunidades que unidos, siembran, cortan, recolectan, tuestan y dan su vida por el café mexicano.
A Don Amado Manuel Izaguirre. Historiador y cronista de Xico. Valiente intelectual de una pieza, honesto y férreo defensor de Xico y su patrimonio cultural.
A los H. Ayuntamientos de Candela en Coahuila y Real de Asientos en Aguascalientes, por trascender en el tiempo y espacio universo eterno . . .
A Perote que muestra sus secretos de manera suave, sensual y erótica, llevándome a deslizar la pluma hacia el mismo infinito. . .

Tamales y café hirviente en un amanecer de niebla y frio en Xico, Veracruz.
El café de olla, aromático, robusto en cuerpo y consistencia, servido caliente en un tarrito de barro tradicional, dejaba exhalar su embriagante y seductor olor, al tiempo que se mezclaba con la niebla que había pernoctado hasta el amanecer y que perezosa se levantaba ante los primeros rayos del sol que impactaban la cara sur del imponente Cofre de Perote, procurando una imagen de ensueño con tonos dorados y naranjas que, sensuales, acariciaban al coloso volcán peroteño, que así abría sus ojos a un nuevo día....
-Señor que bonito es Xico. Es en verdad un pueblo hermoso, parece salido de un cuento de hadas. Es demasiado bonito, su clima, su aroma a café, sus casitas tradicionales, su iglesia y sus casonas con sus arcos...
-Sí, así es señorita, nuestro Xico es muy bonito. Tenga estos tamales señorita, espero sean de su agrado. Le acerco esta salsita de chile seco y este limón con sal. ¿Le sirvo más café?
-Sí, por favor, Don....
- ¡Ramón Martínez Azuegonmass, para servir a usted señorita! Y aquí estoy a sus órdenes. Al final, me dice si le gustaron los tamalitos.
Claudia Cristina cerraba sus ojos, sintiendo la masa y el contenido del tamal que se derretía en su paladar, llenando su ser de gran deleite. Esta sensación era indescriptible, recorriendo todos sus sentidos en una algarabía de sabores únicos, nunca experimentados...
- ¿Usted hace los tamales, Don Ramón? ¡Están deliciosos!
-Sí señorita, desde niño mi madre me enseñó a hacerlos. Perdone señorita, veo que escribe y escribe en su libretita, ya lleva muchas hojitas y se asoma mucho al ventanal como inspirándose. ¿Puedo ser indiscreto y preguntar qué escribe? Y, además, tiene usted una letra muy bonita, como se escribía antes.
-Gracias por el cumplido de la letra Don Ramón. Mi madre, antes de morir, me enseñó a escribir así. Estoy buscando narrar algo sobre Xico, su historia o alguna leyenda. Estoy escribiendo sobre la primera ascensión de Hernán Cortés al altiplano central para llegar a lo que hoy es Perote, desde Xico. Toda plática sobre la historia de este lugar es bienvenida. Es para un ensayo que me piden en la Universidad, entre otros trámites, en la que voy a empezar una maestría en “Historia y Letras Hispánicas” y lo tengo que tener listo en tres meses, para que me den una beca que cubra este año 2025 hasta el 2028. Si no lo entrego me hacen manita de puerquito y no hay beca, ¡je!
- ¿Quiere que le presente a quien la pueda relacionar con alguien que le cuente y platique historias y leyendas sobre Xico?
-Claro que sí, me interesa y mucho.
- ¿Y este escrito sobre ese viaje de Cortés de Xico a Perote, usted lo publicará? Me interesaría leerlo cuando lo tenga.
- Claro que sí, con gusto Don Ramón,
- No se hable más, estamos para ayudarle en su investigación.
-Hija, voy a salir a ver a John.
- ¿Vas a tardar, papá?
-Yo creo sí, ya ves cómo es este Juan y nomás le dices John, porque así le gusta, y se arranca a puro plática y plática.
-Cuando regreses te traes masa para las picadas, por favor apá...
-Ven hija te presento a nuestra clientita.
-Hola, buenos días soy Celia, mucho gusto.
-Mucho gusto, Claudia Cristina.
- ¡Vaya que amaneció con niebla y frio! Hoy abriste re temprano padre. Mi papá es re platicón y como está re guapote el cabrón a todos los clientes les hace charla. ¿No le parece guapo mi apá?
-Que ni qué Celia, tu padre es, además de distinguido, muy bien parecido.
-Dicen que salió a un soldado francés que anduvo por aquí noviando y si no: ojos verdes, alto, brazos fuertes, además muy buen papá, responsable y dedicado. Lástima que esté solito desde que mamá murió hace ya varios años, pero no quiere tener novia.
-Ya sosiégate, Celia, que vas a incomodar a la señorita con tus cosas. Además, nuestra familia luchó contra los franchutes, así que déjate de tus cosas hija mía. Como te gusta darme la lata y testerearme, como dice López Obrador, mi Cabecita de Algodón…
-No se inquiete Don Ramón, Celia le quiere mucho y hace bien en presumir a su papá. Además ¡Que bárbara! Heredaste los ojos verdes de tu apá, ... al tiempo que ambas se sonreían al ver la reacción de Don Ramón. . .
- ¡Ya me caíste muy bien Claudia Cristina! Ten, toma este energizante que distribuimos en mi compañía, tiene colágeno, calcio y aminoácidos para que tengas actividad de forma natural y nutritiva. Ya sabes, somos los de la cortinita verde. Además, tengo un gym con bicicletas para hacer spinning. Antes de irte de Xico, pasas al Club, te doy tu nutrición, nuestro desayuno te va a gustar mucho. Además, te pesamos, escaneamos y claro, tomas una clase gratis en las bicis.
Apá, lleva a Claudia Cristina al rancho para que vea el Cafetal y vea cómo se corta el café, cómo lo beneficiamos y tostamos. Ten este sobre de nuestro café al que hemos nombrado “Café San Jorge” y un costal de yute que huele riquísimo. Que te diga mi papá al rato, cómo San Jorge, nos hizo un milagro hace muchos años.
-Por cierto. Su apellido, Don Ramón, ¿de dónde es?
-Nunca lo hemos podido averiguar de donde es originario. Lo que sí sé, es que mi bisabuelo Xico, hizo de ambos apellidos uno solo. Al casarse acordó con el párroco de la iglesia y también con el jefe del registro civil para adecuarlo a uno solo. En esa época era relativamente fácil, más si tenías una buena posición y siendo miembro de las fuerzas armadas, el trámite se facilitó.
Por cierto, antes de que se me pase, en el beneficio y los cafetales, tenemos una salita de estar muy rústica con dos habitaciones y todos los servicios. Cuando vamos a laborar allá, en la casita descansamos a gusto. La usamos muy seguido y ahí están unas fotos de la familia, los abuelos y bisabuelos. Antes de irte, te llevamos a los cafetales y te quedas un día en la cabaña, te gustará y mucho.
Bueno, me voy apurando porque tengo que preparar a los niños, llevarlos a la escuela y de paso, le llevo este cafecito con miel a mi gordo. Así le digo a mi esposo al que, si no lo despierto con su café hirviendo como para pelar pollos, nomás no carbura el resto del día. Con permiso, mucho gusto y bienvenida.
-Ha sido un gusto conocerte Celia y gracias por el Café, el costal de yute y el producto energético.
-Claudia Cristina. ¿Qué harás mañana que es seis de enero y celebramos la llegada de los Santos Reyes Magos? Ven, te invito que partas la Rosca con nosotros y disfrutes de más atole como el que hace mi apá.
-Será un gusto Celia, aquí estaré mañana por la tarde. . .

-Deje señorita Claudia Cristina que tome mi sombrero y chaleco de borrega porque el frío de este enero e inicio de año, vaya que está calando. Bueno vamos pues a dónde está mi primo Juan Hernández Corona el popular “Tío John”, quien hace poco abrió su restaurante “Hola”, en una casona muy antigua con arcos a manera de portales. Cocina muy bien y sabroso. Sus platillos son de aquí de la región.
- ¡Don Ramón! ¡Qué gusto verte querido primo! - Exclamó con gusto John. Veo que vienes muy bien acompañado por esta bella mujer. Por favor tomen asiento, les sirvo un cafecito de olla y los acompaño.
-Gracias señor Juan, le respondía Claudia Cristina sorprendida por la amabilidad y cortesía de los habitantes de Xico.
-Juan, querido primazgo y vecino, te traje estos tamales. La señorita Claudia Cristina viene desde Coahuila y está escribiendo sobre el viaje de Hernán Cortés, desde el Puerto de Veracruz hasta el altiplano central, y quiere conocer más de Xico, porque por esta ruta los españoles llegaron a Perote.
- ¡Wow! Muy interesante señorita, permítame presentarle a mi esposa Mabel, le gusta mucho leer y seguro harán buenas amigas. Además, así se sentirá más cómoda y de paso nos almorzamos estos tamalitos que nos trajo el primo Ramón.
- ¡Mucho gusto, Claudia Cristina! Le decía Mabel. Te pido que nos hablemos de tú.
-Claro que sí Mabel, con gusto nos tuteamos.
-Te digo de una vez, que aquí en Xico, debes olvidarte de las dietas.
-Gracias Mabel y sí, la comida aquí es deliciosa.
Todos en la mesa, le decían a la coahuilense que regresaría a su tierra con algunos kilitos de más.
-Fíjate Claudia Cristina que tenemos aquí enfrente del restaurante al Cronista de Xico, quién es la voz más autorizada para darte información y datos; es el historiador y cronista Don Amado Manuel Izaguirre, quien además de ser la conciencia de Xicochimalco, como es su nombre completo y original fundado por la cultura Totonaca en el siglo XIV. Tiene, además, un precioso museo que guarda gran parte de la memoria de este pueblo, él te dará todos los datos que necesitas.
¿Estas hospedada aquí en Xico o en Coatepec?
-Aquí, en Xico.
- ¿Cuándo piensas irte?
- Quiero hacer la ruta de Hernán Cortés, de Xico a Perote, pensaba irme mañana en un taxi especial para ir haciendo paradas, tomar fotografías y tomar notas. Sobre todo, ver las iglesias y construcciones más antiguas, pero con gusto me quedo más tiempo, sólo dejen le mando un whatsapp al señor del taxi para aplazar mi salida y también al hotel para hacerles la transferencia al menos por dos días más.
-Excelente Claudia Cristina, así conoces mejor y me permites ser tu guía turística personal.
-Gracias Mabel y sí, en verdad ocupo de tu apoyo, pues es una región con un potencial enorme para investigar y escribir.
-Muy bien, dijo John, quien había vivido muchos años en Oregón y hacía poco tiempo regresó a su amado Xico, con muchas ilusiones para contribuir al desarrollo propio, de su familia y apoyar a la comarca.
- Juan, ¿No le van a platicar a mi nueva amiga, la leyenda de la familia, que la tienen guardada como si fuera secreto de estado? Anden ya, empiecen a contarla que esta buenísima. Claudia Cristina, pon tu celular en modo grabación y saca tu block de notas, porque esta historia te va a encantar. Pero antes permíteme ofrecerte un sabroso licor de café con un poco de Tequila. Toma estas galletas que hace mi madre y este delicioso pan de Xico, que es muy famoso, por estar horneado con leña, además mi mamá le pone vainilla y canela. Tú prueba y me dices…
Ramón y John estaban contentos de ver cómo se hacían amigas y así, sin más preámbulo, estaban listos para platicar la historia de Xico Martínez, quien se enamoró de Carmelita Azuegonmass en un baile en el puerto de Veracruz, en 1861, ese año lo tenemos claro porque fue antes de la invasión de los franchutes y de la Batalla del 5 de mayo en Puebla, ya en 1862, comentaban los primos casi al unísono.
Señorita Claudia Cristina, estaremos hablando los dos al tiempo, pues así le hacemos siempre cuando nos emocionamos, usted habrá de perdonar, pero nuestra abuela así nos contó la historia siendo chamacos sobre la vida de su madre y bisabuela nuestra, Carmen Azuegonmass. Exclamaba emocionado John, quién era por demás emotivo y expresivo en sus sentimientos. Es usted la primera persona a quien le vamos a compartir la leyenda de la familia y que, hasta el día de hoy nos atrevemos a hacerla pública.
Déjenos ir a la casa de la difunta abuela, que Dios tenga en santa gloria y sacar del baúl el escrito que nos dejó para traerlo y leerlo....
Una vez que regresaron, sacaron una serie de papeles muy antiguos, bien conservados en un portafolio de cuero, que tenía algodón y sal para absorber la humedad y así evitar que las hojas se descompusieran. Pasemos a la mesa que está adentro para que el viento no vaya a volar alguna hoja. Doña Joaquina, por favor cierre los ventanales de madera y encendamos la luz.
-Empecemos pues “Tío” (expresión que es muy usada en Xico, para dirigirse entre las personas) le decía Don Ramón a John, que esto va pa´ largo:
-Sí, ya voy, ya voy “Tío”.
Así, Don John se colocaba las gafas de lectura. Con manos temblorosas y muy emocionado, empezaba a leer, las memorias que dejó escritas Carmelita Azuegonmass. Bueno, les recalco, que todo lo que viene a continuación fue escrito por la parientita Carmelita, así nomás, parientitos y nada más que por ella… Ahora sí ahí les voy, nomás otro sorbito a mi cafecito con tequilita…
Las Memorias de Carmelita Azuegonmass
Xico, Veracruz, México a sábado 16 de este mes de septiembre de 1939
Escribo estas palabras a mis 93 años, en honor a mi valiente soldado y el mejor Subteniente, mi siempre fiel y amado Xico Martínez Morales, que dio lo mejor de sí por México y nuestro amor. Muchas cosas han sucedido en nuestro país desde mi nacimiento hace un poco más de nueve décadas…
Sé que son de mis últimos suspiros en este mundo y quiero aprovechar con pasión cada respiración que pueda inhalar y exhalar, así como cada café y tequila que pueda beber y, sobre todo, cada tecla y letra que pueda escribir.
Agradezco a mis nanas, amigas y confidentes Amalia y Marcelina, tener el amor y paciencia, de cuidar a esta anciana achacosa pero bendecida, por tener buena mente, lúcida y sana. Los seres queridos me trajeron a Xico, pues aunado al gran amor que le tengo a este pueblo, el clima me hizo mucho bien, además por estar aquí las querencias que aún pueden cargar con las necesidades de esta vieja anciana que les comparte estas letras. En fin, recuerdo cuando todavía podía andar a lomo de mula y burro, los caminos de Xico a Perote, pero los años se la cobran y sabiendo que debo aprovechar que aún veo y puedo escribir en esta útil máquina que me obsequiaron mis comadres Marce y Amalita, que, además, me ayudan a colocar las hojas, cambiar la cinta de la tinta y cuando mis dedos ya no pueden escribir más; ellas lo hacen por mí, atentas a lo que les dicto. Son una gran bendición.
Mi Xico, mi gran amor, nacido es este hermoso y bendecido pueblo, por eso te bautizaron con el nombre de Xico.

Gracias a mi amado Xico Martínez Morales y su gran apoyo, pude estudiar ya grandecita en la Normal de Xalapa en 1890, teniendo como mi maestro al mismísimo Don Enrique Rébsamen. Fui alumna de las primeras generaciones en la Normal, que la habían inaugurado tres años antes en 1886.
Porfirio Díaz se había interesado en las practicas pedagógicas de Rébsamen y lo recomendó con el gobernador Enríquez, quien dio todo su apoyo para concretar las ideas y proyectos educativos del intelectual suizo.
Cuantos sucesos se han dado en estos 93 años, mi México querido. Los gringos nos invadieron durante el año de mi nacimiento. Era presidente interino de México Mariano Paredes y Arrillaga, conservador el muy cabrón, luego Santa Ana con sus torpezas y la Guerra de Reforma, la Constitución de 1857 de Juárez y sus broncas con la Iglesia, hasta que llegaron los franceses y les hicimos tragar tierra hasta expulsarlos. Logramos rescatar los ideales de Guadalupe Victoria que falleció en Perote, aquí del otro lado del volcán.
Maximiliano que resultó ser más liberal que muchos liberales y azu ¡Bueno pa las chamacas y aventuras amorosas! Era un enamorado del amor y el sexo, la naturaleza, la cultura y a su forma quiso mucho a México, sin saber que aquí terminaría su vida. Pero el muy cabrón dejó chamacos a montón. Me platicaron de una familia que era descendiente de una famosa mujer a la que apodaban “La Dama de Rojo” casada con un alemán que llegó a México en 1856 y tuvo con él dos niños nacidos en 1858 y 1860. Este señor, el marido, muere en 1862 y la Señora de Rojo, tiene dos niñas entre 1865 y 1867. Cuenta la leyenda que Maximiliano la veía en el bosque de Chapultepec, donde tenían sus quereres y amoríos.
Una de sus hijas, la Tía Luz, como le decían, contrae matrimonio con un militar a finales del siglo XIX y éste, su estricto y porfirista esposo, le tenía prohibido hablar de su padre. Cuando le preguntaban por su papá, ella sólo decía se llamaba Max, se llamaba Max, y comiendo galletitas bañadas en espumoso chocolate caliente en su taza de porcelana francesa, lo repetía incesantemente. Así la Tía Luz, en las cercanías del Parque Lira en la exclusiva Colonia de Tacubaya de la Ciudad de México, llena de mansiones, guardó el secreto de su descendencia de Maximiliano de Habsburgo, en un mutismo que la consumió y gritaba en silencio. Se llevó ese secreto hasta su muerte, no sin antes haber dejado una carta póstuma donde narraba su historia personal.
Benito Juárez, al final ganaste y con la mayoría de los mexicanos apoyándote, entre estos mi valiente padre, que con suma dignidad defendió tus ideales con valentía, arrojo y determinación. Esta generación de gigantes, salvó nuestra patria y nos dio la certeza que íbamos a conservar nuestro país independiente y glorioso. Luego Don Porfirio, que unificaste al país con tu infraestructura ferroviaria y de puertos, pero que olvidaste al pobre y al marginado. Ser de contradicciones que te alabo por tu lucha contra los franceses y te critico por no haberte retirado a tiempo. Pero sabemos que una vez más los gringos metieron su cuchara. Mis adorados Villa y Zapata, cuyos ideales nos dieron identidad, hasta que Don Venustiano Carranza nos dio nuevamente una Constitución para transitar con pasos firmes a la vida institucional. Pero los trances no terminaban ahí, la Guerra Cristera nos devastó el corazón y hasta que nuestro actual presidente Don Tata Lázaro Cárdenas, nos devolvió el petróleo, la justicia a los Yaquis y Mayas. Mi querido Tata Cárdenas, además creaste la Institución que todos los educadores y amantes de la cultura e historia habíamos peleado tanto: “El Instituto Nacional de Antropología e Historia” apenas en febrero de este gran año de 1939.
-Mis niñas Amalia y Marcelina, pásenme un puro, de los delgados que casi parecen cigarritos y mi copita de tequila.
- Doña Carmen, no debe fumar ni tomar ya se lo dijo el Doctor.
-De todas formas, me van a enterrar o a incinerar, polvo seré… Que importan unas fumadas y unas copas más.
Anden pues, vamos a escribir otra vez, que ya me llegó la inspiración. Por favor, prepárenme otro café, ahora con vainilla y canela, bien caliente, en mi tarrito de barro, y otra copita de tequila. Y no me digan ya nada de los consejos de los doctores.
-Doña Carmelita. ¿Le pasamos su jorongo? Ya empieza el frío de la tarde.
-Sí, por favor mis niñas. El que tiene escudo nacional con el águila y la serpiente, de un lado, y del otro el calendario Azteca, desde que lo bordé hace muchas décadas ha sido mi consentido.
Con gran temple y fuerza que sorprendía a propios y extraños, Carmelita ajustaba la silla, y una vez que regresaba a la máquina de escribir, se perdía en el tiempo y no dejaba de teclear. Amalia y Marcelina, estaban atentas y además siempre gustosas de ayudar a su mentora, amiga y también confidente.
Un fuerte suspiro de la maestra, tomando aire desde lo más profundo de sus sentimientos, le inspiraba a escribir y a hablar al mismo tiempo, como si le dictara órdenes al teclado de la máquina, y ésta siguiera cada palabra de Doña Carmelita. Que éste mi diario y memorias, se lean algún día para que se dé a conocer el gran amor que le profesé a mi valiente Subteniente Xico Martínez Morales y que mis descendientes y seres queridos sepan que tienen sangre de un gran guerrero que luchó por México y nuestro amor.…
“En Perote, te veré mi amor” … Así fueron las últimas palabras que te dije amor mío, cuando te fuiste a la guerra contra los franceses aquella fría tarde de ese miércoles 23 de abril de 1862. Se celebraba misa en la Iglesia de Miguel Arcángel, en honor a San Jorge. Me tomabas de la mano con fuerza, y haciendo un esfuerzo sobrehumano, por no mostrar tus sentimientos y yo, aún no sé cómo pude contener el llanto y mis lágrimas mudas, rodaban por mi rostro. Estaba desesperada y mi corazón explotaba de dolor, esperando tu partida para enfrentar a los franchutes que nuevamente nos volvían a invadir.
Al terminar la misa, te di una medalla de plata y oro, grabada con la imagen de San Jorge.
-Ten, llévala contigo. Él te cuidará y su dragón de fuego quemará a tus enemigos, su caballo te hará invisible a los ojos del invasor y San Jorge te dará la valentía para salvar a nuestro México. Te prometí que te esperaría y buscaría esa señal de fuego en una gran fogata que habrías de hacer en la parte más alta del Cofre, nuestra amada montaña y con fuegos artificiales me anunciarías tu regreso. Te dije: ¡Promételo Xico, promételo!
-Sí, Carmelita, mi chaparrita ojos claros, mi abejita laboriosa y dulce novia mía. Así lo haré y así te anunciaré mi regreso a ti, desde lo alto del Cofre de Perote con un gran fuego que vendrá del dragón de San Jorge y fuegos pirotécnicos que anuncien mi retorno a ti, mi amada. Gran montaña y coloso de Perote que nos observas majestuoso en este instante y jurando ante San Jorge, me hinco ante ti, mi carísima Carmelita, para pedirte santo matrimonio y te ruego me esperes, pues prometo y juro regresar y así nunca separarnos nunca más…
También le ruego e imploro a Rafael Arcángel te de salud y protección a ti, a nuestros seres queridos y amistades afectas.
Recuerdo que te abracé y te di el sí a nuestra sagrada promesa de amor eterno, pero no pude disimular mi tristeza y rompí en sollozos que tú mi Subteniente, supiste ocultar de la gente, al darme tu abrazo protector.
-Tus palabras me llenan de júbilo y esperanza, mi Xico amado.
Xico, mi amor. Todas las mañanas, al salir de misa de seis, me apostaré a un lado de la Iglesia de Miguel Arcángel y vigilante observaré al Cofre de Perote. Veré su cumbre magnífica y estaré atenta a la señal de la gran fogata y fuegos de celebración que, desde lo alto de la montaña, me dirán que has regresado para no irte nunca más....
-Así lo haré mi amor, así será. Te prometo la hoguera más hermosa del mundo y los fuegos pirotécnicos que anuncien mi regreso y serán tan intensos, que habrán de llegar a la luna misma....
-No sólo asistiré a misa de seis de la mañana, lo haré también por las tardes y así cuando el sol se ponga sobre el oeste, también montaré guardia, esperando tu hoguera inspirada en el dragón de San Jorge y los fuegos de artificio que me dirán que has regresado. Porque soy tuya, y siempre he sido y seré tuya.
Haré esta gran manda por nuestro amor y así con el favor de nuestra Virgen de Guadalupe Tonantzin, regresarás a mi…
Y así fue, así lo cumpliste mi soldado de honor. Regresaste un hermoso atardecer de octubre de 1867, eran las cuatro de la tarde y las campanas empezaron a repicar solicitando a la gente que se acercara a la plaza. Fueron a avisarme a la casa, estaba yo tejiendo un Jorongo y empezaron a tocar con fuerza el portón de madera.
¡Carmelita! ¡Carmelita! Salga pronto, venga, que hay noticias desde la plaza y el señor Cura, nos mandó por usted...
Nuestra casa estaba cerca de la Parroquia de Miguel Arcángel, por lo que mi madre y yo llegamos en minutos. Fue el martes 26 de octubre, lo recuerdo bien, hacía mucho viento, frio y helado, pero despejado y viendo como el sol se reflejaba en la cumbre de nuestra bien amada montaña, pude divisar humo en lo más alto del Cofre.
-¡Mire Carmelita, mire bien en la cumbre! Le decía la gente a Carmelita quien emocionada no podía contener sus lágrimas al ver una fogata y el inicio de fuegos pirotécnicos que anunciaban que Xico, estaba de vuelta.
El jefe Militar, el Capitán Primero Maytorena, prestaba unos prismáticos a Carmelita quien ahora sí podía divisar mejor la gran fogata y los fuegos que su amado enviaba como señal de su amor eterno y cumplimiento de la promesa de amor que le hiciera en abril de 1862.
-No se preocupe Carmelita, en este momento ordeno que una cuadrilla de soldados vaya por su prometido y se lo traigamos sano y salvo.
-Gracias Capitán, gracias, muchas gracias.
-Que los acompañe el doctor de la Fortaleza y dos de sus ayudantes por si tiene alguna lesión.
- ¡Cabo Núñez!
- ¡Sí mi Capitán primero, usted ordene!
-Que desde la Fortaleza enciendan Fuegos Pirotécnicos y manden señales de espejo con los reflectores-hoguera en clave a la distancia, indicándole al Subteniente Xico Martínez Morales que se quede en la cumbre, que nosotros le encontraremos en el transcurso de la madrugada y amanecer. Que ya lo tenemos ubicado, que no se mueva. Que se instale debajo de la gran roca del Cofre y mantenga su fogata. Que desde el fuerte y la Torre de la Iglesia estaremos vigilantes.
Con su permiso Carmelita, tenemos que darnos prisa, para que no se nos congele su prometido y valiente soldado mexicano.
De vuelta al restaurante Hola y al 2025.
Claudia Cristina no podía contener su emoción, y sus lágrimas se derramaban por la historia que estaba escuchando. Don Ramón, John y Mabel, también emocionados, aplaudieron y brindaron con más tequila mezclado con licor de café.
-Se me antojó un puro con la lectura decía Claudia Cristina….
-Tengo unos puros de San Andrés Tuxtla, aquí mismo, dejen saco la caja.
-No los acostumbro, pero venga, que esta tertulia bien lo vale y también se me antojó un purito, replicaba Mabel.
Quedaron sorprendidos al ver la destreza de la mujer de Múzquiz al fumar su puro.
- ¿Tiene un poco de ron derecho Don John? No quiero romper la tradición de fumar mi puro sin un buen ron veracruzano.
-Yo te secundo querida amiga decía Mabel, venga otro puro de los Tuxtlas para mí y, también mi ron derecho. John y Ramon, les pregunto: ¿Hay más información de Carmelita? Dónde ella misma siga platicando su historia.
Pasaron las horas y cuando acordaron ya eran más de las dos de la tarde.
-Que bárbaros, cómo nos gusta el chisme, exclamaba Claudia Cristina.
-Tengo que ir a la Iglesia a ver al sacristán para ver unos asuntos pendientes con él, comentaba Mabel. ¿Quieres venir conmigo, Claudia Cristina?
- ¿Se puede que les vea ya en la noche? Quiero descansar, esta lectura me llegó y movió muchas fibras. Además, tengo que escribir un poco y hacer unas llamadas a mi tierra. ¿Les parece bien como a las ocho? Así sirve que les traigo un detalle de allá de Coahuila que tengo en el hotel.
-Perfecto no se hable más, nos vemos en la noche, paso por ti al hotel querida ClauCris…
-Estaré atenta y qué curioso Mabel, así me dicen mis primas que viven en el Puerto de Veracruz, te las tengo que presentar, se van a caer muy bien.
Se reanuda la Tertulia lectora en la noche.
-Buenas noches, ClauCris. ¿Descansaste amiga?, preguntaba Mabel que había ido por Claudia Cristina al hotel.
-Sí, estaba muerta del cansancio y hasta soñé con la historia de Carmelita, me sentí muy identificada, pero ten, les traje estos detalles, es carne seca en trozos y otro sobre de carne ya para machaca, pan de pulque de Arteaga y este Sarape de Saltillo.
-Muchas gracias, muchas, te aceptamos de corazón tan lindos regalos. Bueno vamos al restaurante a retomar la lectura. ¿Cómo te han tratado en el hotel?
-Muy bien. Este hotel tiene una arquitectura muy bonita, con esos arcos tan típicos de los pueblos mágicos. Mi habitación está preciosa, decorada con estilo mexicano y un colchón duro, que me encanta. Y su cafetería, con muebles rústicos y el café, qué sabroso. En verdad Mabel, vives en un lugar de ensueño.
-Xico es tu casa querida ClauCris. Vamos. Te tomo del brazo porque por la niebla y el chipi chipi, el suelo se pone resbaloso.
Ya había llegado Ramón al restaurante Hola y estaba en pleno chisme con John.
-Que gusto que nos vuelva a acompañar Claudia Cristina, a quien saludaba con afecto, dándole un respetuoso beso en su mano.
-A ver Ramón, ayúdame a ver entre todas estas hojas qué más podemos encontrar, porque son muchas.
¡Flota y amigos de tertulia literaria! Exclamaba John con su acostumbrado carisma y bonhomía. Les propongo leamos esta gran historia de las memorias de Carmelita a la luz de estas lámparas de petróleo, así daremos más profundidad, mística y sentimiento a este momento.
¡Perfecto! Todos aceptaron al unísono.
John tenía quinqués de combustible de esos que se usaban a inicios del siglo pasado.
-Pero venga, pongámosle algo de música a esta mágica reunión con las melodías del gran Agustín Lara, el ciudadano de Tlacotalpan, y jarocho por excelencia. Algo de danzón que él compuso…
El ron, el tequila y el licor de café, bajo el embrujo del humo y fuerte aroma de los puros, al sonido del maestro Agustín Lara y la música de danzón, daban a ese momento un toque mágico.

- ¿Me permite señorita Claudia Cristina esta pieza?
- Será un gusto Don Ramón
Ramón sentía los movimientos lentos y cadenciosos de la cadera de Claudia Cristina, quien notaba los nervios de su compañero de baile y de forma sensual y suave acercó más su cuerpo, apoyando sus brazos en los hombros de su nuevo amigo. Así pasaron un rato dejando que la magia del momento fluyera a través de la música. Movimientos suaves y pausados, invocaron la sensualidad y atrajeron recuerdos y deseos al sentir mutuamente sus cuerpos que navegaban bajo un solo compas.
¡Vengan, sigamos leyendo! Les bromearon desde la mesa...
Sonrojados Don Ramón y Claudia Cristina regresaron a la mesa, conscientes que ese era el inicio de una amistad muy especial que trascendería.
- ¿Encontraron algo más de la vida de Carmelita?
-Sí. Aquí viene cómo ella cuenta desde que nació, escuchen que está bueno.
Ahora que recuerdo éramos niños, cuando nuestras mamás, juntaron nuestros cumpleaños porque ambos lo celebramos en abril y también nacimos ese mismo año de 1955. Era nuestro cumpleaños número diez, tuvo que ser en 1965.
Tú, Ramón, naciste el 19 de abril y yo el 23. Estábamos bien chamacos cuando la abuela Beatriz, en esa celebración, después de la piñata, nos juntó a los nietos y sacó las memorias de su madre, la bisabuela Carmelita y comenzó a leerlas.
- ¿En qué año nació la abuela Beatriz? Preguntó Claudia Cristina.
- En 1881, respondió Ramón. Cuando nos leía, tenía un timbre muy bonito en su voz. Tenía 84 años cuando empezó a organizar estas lecturas, que no fueron muchas, habrán sido una cuatro o cinco a lo mucho, porque después enfermó y murió a los 88 años, en 1969. Fue una gran Bibliotecaria.
- ¡Salud por la abuela Beatriz! Que su memoria sea eterna... Y levantando las bebidas todos brindaron al unísono.
- Pero venga que ya está, a leer; exclamaba conmovido John por el recuerdo de la abuela Beatriz. Nomás dejen doy un sorbito a mi ron y a mi cafecito de olla.
Toc, toc, toc, sonaba la puerta del restaurante.
- ¿Quién podrá ser a esta hora? Se preguntó John. Dejen abro y veo quién es.
- No te preocupes Claudia Cristina, aquí Xico es muy tranquilo, le decía Mabel.
- ¡Prima Claudia Guadalupe! Pero qué gusto, pásale primaza, deja te presento a nuestra afecta invitada la señorita Claudia Cristina.
-Salí tarde del museo, pues llegaron unos documentos antiguos y los tuve que clasificar, ya iba rumbo a mi finca y beneficio, pero vi encendido y escuché música y me dije, me les uno, ya ven que no me gusta la chorcha.
-Nuestra prima Claudia Guadalupe, decía Don Ramón, también tiene su Cafetal y Beneficio y dos tiendas de café, que son también cafés literarios en Aguascalientes y en Puebla. Tiene excelente mano para dejar el café en su punto, en varias presentaciones. Cuando vayas a cualquiera de estas ciudades, no dejes de visitarle. Y he ido a la de Tlaxcala y es una belleza ese lugar, con libros antiguos, novelas.
- Somos tocayas Claudia Cristina que gran gusto, ahorita me dices todo sobre ti, pero brindemos por este encuentro. Ya sabes mi John, ron derecho por favor.
- Aquí tienes querida prima y sigamos con la lectura. . .
- Quiero proponer un brindis por todos ustedes y muy agradecida por cómo me han tratado. Esta tertulia que déjenme les comento, es sin duda, una de las mejores de toda mi vida.
¡Salud!
Toc, Toc, Toc, nuevamente llamaban a la puerta con ímpetu y sonoridad.
-Yo abro, acabo de llegar y me toca abrir.
¡Compadre Marcelino! Que gusto verte. ¿Pero dónde te habías metido?
-Con la finca y el beneficio que este año gracias a Dios, nos está yendo muy bien.
Todos le dieron un afectuoso abrazo a Marcelino, quién era muy respetado y querido en la región.
-Para no desordenar las hojas que ya habían ordenado, preparemos otras mesas, para la cena, exclamaba de contento Don Ramón. John y Mabel se dispusieron a cocinar unos chilaquiles porque esa tertulia iría para largo y se ameritaba una buena cena. Excelsos anfitriones, abrieron una botella de vino tinto de Parras, Coahuila, prepararon unos quesos, jamón, aceitunas, acompañadas de chiles jalapeños deliciosos.
-Claudia Guadalupe y Marcelino, les compartimos, comentaba John, que han llegado a una reunión literaria y se irán hasta que terminemos. Estamos leyendo las cartas y memorias que nos dejó Carmelita Azuegonmass, en 1939.
Mabel, por favor ¿Puedes traer los jorongos y sarapes? Pronto empezará a bajar la niebla de la sierra y el frio arreciará.
-Te ayudo comadre, decía Claudia Guadalupe.
-Y yo también les ayudo, replicaba animosa Claudia Cristina. Así paso al tocador y les comento un tema de mujeres.
-Vamos Claudia Cristina, y tomando del brazo a Claudia Guadalupe, Mabel llevaba a las dos Claudias a la parte superior de la casa y ahí harían un importante espacio, para regresar con los jorongos y sarapes. Oigan, tengo estos pants deportivos de lana, están muy cómodos y calientitos, tengan estas gruesas calcetas de doble lana de borrego de Michoacán. ¿Les late mis Claus?
-Sí claro, exclamaron al unísono las Claudias, como serían llamadas desde esa tertulia…
-Bueno, vengan a mi cuarto para cambiarnos, ponernos a gusto y chismear tantito en lo que los caballeros terminan de arreglar todo allá abajo, y de hacer la cenita. Mientras tanto nos tomamos este rompope. Tengan los pants, las calcetas y estas copitas para el rompope que hacen unas monjas aquí en Xico.
“Grupo Makarenko-Caso-Narro”
Claudia Guadalupe y Marcelino, estaban innovando algunos procesos alrededor de la siembra, desarrollo, corte, limpia, tostado, empaque y venta que incluían planes de comercialización más ambiciosos, para sus cafetales y beneficios. Para esto, formaron una asociación para buscar créditos, mejores semillas, maquinaria para toda la transformación: desde la siembra de arbolitos genéticamente más resistentes, optimizando el corte de la cereza del café, el traslado a los beneficios donde se hacen los procesos, hasta los puntos de venta.
Ponían especial interés en mejorar las condiciones laborales a los jornaleros que cortan la cereza del café y sus familias que hacen esta exhaustiva actividad, con mejores equipos, botas adecuadas y todos los implementos necesarios para su trascendente actividad en la industria del café mexicano.
Conocieron así a tres inquietos intelectuales (un chihuahuense, un veracruzano y un guerrerense) en el campo de la pedagogía, la agronomía y la abogacía cultural.

El Maestro Juan Flores Enríquez Pedagogo, Normalista y brillante ex Presidente Municipal de Casas Grandes Chihuahua, defensor del fortalecimiento de la Identidad regional desde la psicología social y la pedagogía, con interesantes cursos en competencias agrícolas y formación de grupos de trabajo interdependientes en las mismas comunidades y ejidos. El profesor Flores Enríquez ha desarrollado en cada uno de sus campos de acción una interesante simbiosis, al combinar y ensamblar, la visión del escritor y pedagogo Antón Makarenko, ruso, que escribió y defendió una visión colectiva de trabajo sobre el individualismo. Al promover la interdependencia de una persona con su sociedad inmediata, fortalece así también al mismo individuo, haciendo más fuerte la estructura social. El maestro Juan Flores, con un gran sentido institucional, además se dedica a asesorar a los ejidatarios en sus derechos agrarios, civiles entre otros más, en sus trámites ante las instituciones federales, estatales y municipales, encargadas de apoyarles a ellos y sus familias.
El Abogado Raúl Pantoja Baranda, de Cuetzala del Progreso, Guerrero, férreo defensor del derecho humano a la agricultura ejidal y de las cooperativas en una sana relación jurídica con los productores privados, y experto jurídico en el delicado tema del manejo del agua. Tenía su inspiración en el gran mexicano universal, también abogado y antropólogo, Alfonso Caso, quien fuera cofundador y el primer director de INAH (febrero 1939), entre múltiples cargos y encargos, como haber sido Rector de la UNAM (Universidad Nacional Autónoma de México). El abogado Raúl, representó a México en una serie de eventos en Etiopia, Kenia, Argelia, Túnez, Nepal y la India sobre el derecho a la agricultura cultural, se desempeñó en España dirigiendo una serie de esfuerzos legislativos que hicieran conciencia ante la Unión Europea, por el impacto negativo de las legislaciones europeas sobre los agricultores y ganaderos españoles.

El Ingeniero Agrónomo Gerardo Jorge Aguilar Jácome, de Coatepec, Veracruz, experto en el fortalecimiento de cultivos masivos con fertilizantes de última generación, promotor de la construcción de infraestructuras para remediar suelos y evitar la erosión, con planes de reforestación que permitan la recarga de mantos acuíferos en las mismas comunidades, ejidos y cooperativas siendo un experto negociador agrario. El ingeniero Aguilar Jácome se inspiró en la obra de Antonio Narro Rodríguez, ideólogo de la famosa Universidad que lleva su nombre. Narro, después de estudiar técnicas en agricultura y teneduría de libros en el extranjero, regresa a México, compra una ex hacienda en la que hace fortuna. Así en 1912 en los espacios de la Hacienda de Buenavista planea crear una Universidad dedicada a la enseñanza de la agricultura en Saltillo, Coahuila como institución de beneficencia, para que los futuros agrónomos que no tuvieran recursos económicos, pudieran acceder a estudios en agricultura. Sin embargo, por la Revolución Mexicana, este proyecto se consolida hasta 1923.
Este trio de inquietos y eruditos ciudadanos habían formado y fundado el “Grupo Makarenko-Caso-Narro S.C.” en honor a sus “tótems intelectuales y fuentes inspiradoras de sus carreras profesionales”. Makarenko, Caso y Narro, tres grandes hombres eruditos y gigantes que trascendieron a sus propias historias, dejando que sus causas fueran el motor de sus nobles ideales. El intelectual mexicano Alfonso Caso, quien dio vital importancia al patrimonio cultural como elemento generador de identificación y cohesión nacional de México. El pedagogo y escritor soviético Antón Semiónovich Makárenko, quién desarrolló el trabajo colectivo a través de una ruta de la pedagogía en la unión soviética con mucho éxito, y el gran Antonio Narro, uno de los padres de la sistematización del estudio de la agricultura en México.

- ¡Ya chicas, bajen! ¡Ya dejen el chisme! Hasta acá se escuchan sus risas, les llamaba John.
- ¡Ya, ya vamos! ¡Qué desesperados son, chicos! Respondieron las chicas, apareciendo en el comedor.
Claudia Guadalupe, que no pudo evitar escuchar como Marcelino relataba lo que estaban haciendo con este grupo “Makarenko-Caso-Narro”, les comentaba: - Pero déjenme les digo más sobre este tema, muy rapidito. Lo que estamos haciendo Marcelino y yo, decía mientras les regalaba unos panquecitos, miel y unos sobres de café de la primera cosecha de su cafetal y beneficio. Café que denominó Parákata, que significa mariposa en idioma purépecha.
- Recordarán que antes de venirme a radicar a este maravilloso lugar que es Xico, Xicochimalco, como bien dice mi maestro Don Amado Manuel Izaguirre, nuestro querido Cronista. Bueno el tema es que viví, algunas lunas en la Meseta Purépecha, trabajando en la conservación de la Mariposa Monarca, haciendo proyectos culturales para las comunidades y cursos de turismo que nos dio en Morelia una maestra que se llama Blanca Lorena Roldán Loranca. Ella dirigía los cursos en competencias laborales en temas de turismo rural y su enlace con el turismo comercial, eslabonando a las comunidades con los grandes hoteleros, buscando una relación de win-win. Sumado a esto, la maestra Blanca Lorena tiene una serie de escritos con enfoques muy interesantes desde la Identidad psicológica del individuo y su asimilación en su entorno regional, desde la promoción, investigación, conservación y difusión de las gastronomías regionales. Supe que creó una fundación que se dedica a dar cursos y capacitaciones en estos temas.
Ahí en el curso, la maestra Blanca Lorena, aterrizó un proyecto en la Meseta Purépecha, inspirada en las Mariposas Monarca. Me presentó con una curandera muy sabía. En una sanación que me hizo, me dijo que mi tonal, era la Parákata, y así, me llevó a un viaje astral: vi una enorme Mariposa que me llevaba consigo desde que era oruga hasta convertirse en una majestuosa Monarca. Fue como volver a nacer, literal, me vi desde que era feto hasta mi nacimiento, no les miento estuve en ese trance como tres días.
Siempre le estaré muy agradecida a la maestra Blanca Lorena, es una eminencia y voz muy autorizada, sobre todo excelente mentora y maestra; pero como amiga y confidente, vale mil. Quiero contactarla de nuevo…

- ¿No les has dicho Marcelino cómo nos conocimos e hicimos grandes amigos?
- No, no les he comentado, pero ahora lo haré: Hace tres años me dijeron de unos cafetales en tierra caliente Michoacán, con mezclas de granos arábigos, robustos e interesantes injertos que habían traído directamente desde Etiopía, país que vio nacer al café y empezó su domesticación. Los integrantes de este grupo, organizaron algunas pláticas en la hermosa Pátzcuaro, ahí coincidí con nuestra inquieta y siempre activa Claudia Guadalupe, que hablaría, sobre las Mariposas. Fuimos a cenar con otras amistades y ahí empezó la amistad. Le dije de mis cafetales y beneficio, además de la tienda y tostadora en Xalapa. Me visitó, conoció a mi esposa y familia y empezamos una relación de trabajo en la cual yo le dije todos los pasos a seguir, desde la elección de las semillas, siembra de los arbolitos, hasta llegar, al tueste y venta final.
-Marcelino es el mejor de los maestros, que bárbaro compadre, te luciste todo este tiempo. Gracias a tus enseñanzas y al apoyo de tu empresa “Café Kukulkán”, puedo decir ahora que “Café Parákata”, existe. Y estoy segura que al Dios Kukulkán que es el mismo Quetzalcóatl, le gustan las mariposas.
-Gracias, apreciada Claudia Guadalupe. Recientemente contactamos a este grupo “Makarenko-Caso-Narro” y nos harán una presentación en la casa del Cronista Don Amado Manuel Izaguirre. Gracias a la intervención de nuestra guía y curadora del museo, nuestra afecta y querida Claudia Guadalupe, quien le comentó al historiador Amado Manuel de estas pláticas. El Cronista de Xico, aceptó albergar la conferencia en su casona que es el lugar ideal. Don Amado Manuel es un tipazo, honesto y cabal, enfatizaba Marcelino.

-Bueno así que ya saben, en una semana tendremos este evento y mi querida tocaya Claudia Cristina, te vienes estos días a mi casa, porque no te dejaremos ir hasta después de la conferencia con los maestros Juan Flores, Gerardo Jorge Aguilar y Raúl Pantoja.
-Claro que me quedo más días tocaya. Y, bueno, ¿quién soy yo para resistirme a esta conferencia? Será muy interesante. Además, tener la oportunidad de conocer al Cronista de Xico será un gusto y honor.
-Voy a encender las luces, y a apagar las lámparas de petróleo en lo que cenamos, y cuando volvamos a la tertulia, las volvemos a encender. ¿Les parece bien? Comentaba John.
-Vengan todos pues. Cenemos que ya están listos los chilaquiles, las picaditas rojas, verdes, de mole, frijoles, hay garnachas y quesadillas de pollo en pipián, chicharrón en salsa verde con estas tortillas hechas a mano, con estos frijoles charros de miedo a los que le agregamos la machaca que ClauCris nos trajo y por supuesto estos tamales que nos manda mi hija Celia, hay de mole rojo, chile verde y también tamalitos dulces, todo está delicioso.
De postre estos flanes y claro este exquisito café que nos ha regalado Claudia Guadalupe de su primera cosecha.
Al paso de un par de horas, degustando, platicando y bromeando, se llegó el momento de retomar la lectura. John colocaba el café para que quien quisiera se pudiera servir, junto a pan dulce, trozos de chocolate amargo y galletitas de polvorón azucaradas, acompañadas del pan de pulque.
Como si fuera a presidir una ceremonia, John preparaba las lámparas de queroseno, se colocaba un impresionante y majestuoso jorongo bordado con la figura de Quetzalcoatl-Kukulkán, parecía una capa-jorongo. Al tiempo que encendía los antiguos quinqués de petróleo y apagaba las luces, el ambiente regresaba a la mística que le había envuelto en la primera lectura de las memorias. El humo de los puros y cigarrillos impregnaban el ambiente. El tequila, café y ron explotaban en los paladares de todos los presentes, quienes como hipnotizados por ese momento místico, se envolvían y sincretizaban sus orígenes…
Las luces finalmente se apagaron y dieron paso a la fiesta de las letras iluminadas por las lámparas de queroseno. Palabras escritas antaño por la magia de la pluma de Carmelita Azuegonmass, así bajo ese ambiente y embrujo del humo y sabor de puro, el aroma del café, la fuerza del tinto, el ron y el tequila, cuyas botellas hacían juguetonas sombras a la luz de los candiles y la veladoras dedicadas a la Virgen de Guadalupe y a San Judas Tadeo.
Sombras que se movían al compás de la lectura, en ese ambiente de magia, se sentían la voz y presencia de la autora que parecía como si ella misma, leyera tan deliciosas memorias...
Carmelita cuenta la historia de su vida, desde su nacimiento.
“Nací en Saltillo Coahuila un frio y helado cinco de enero de 1846, en medio de una copiosa nevada. A los años, mi madre me dijo que mi parto había sido relativamente tranquilo y sin complicaciones, como plumas de nieve, sin ruido, sin dolor más allá del normal de forma suave y blanda.
Los abuelos de mi madre Ana Cecilia Weltzien Buchholz, habían llegado a la Nueva España en el año de 1793, oriundos de un pueblo alemán llamado Freiburg, eran buenos en temas de minas y ni se diga trabajando la cantera. Curiosos en temas de cultura, bosques e historia, habían recorrido toda la zona del Bajío y llegado hasta Zacatecas y Durango siguiendo la ruta del Camino Real de Tierra Adentro. Hicieron mapas, dibujos y anotaciones diversas sobre la cultura, flora y fauna. No tardaron en ser abordados por el mismísimo Alexander Von Humboldt, cuando este pasó por Guanajuato en 1803 visitando la mina de la Valenciana, famosa en todo el mundo.

El famoso explorador alemán se interesó mucho en los relatos de sus compatriotas hacia el norte del virreinato. Y le llamó la atención, y mucho, el nombre de “Saltillo”, por lo que les hizo una oferta a los abuelos de mi madre, mis bisabuelos. Que migraran hasta Coahuila, le hicieran mapas y dibujos, escribiendo todo sobre geología, fauna, flora, describiendo su travesía a manera de un diario, sin perder detalle alguno. Los términos económicos no fueron problema y así sin más mis inquietos antepasados se arrancaron hasta tierras norteñas. Entre sus razones para migrar, me dijo mi mamá, además de la aventura, estaba el buscar nuevos horizontes, tierras y un mejor desarrollo, porque la situación social y política, en el Bajío ya se estaba conflictuando mucho entre los criollos contra los peninsulares.
Los rumores de protestas no eran ya ajenos a los oídos de Humboldt, quien inclusive le hizo llegar una carta al Rey de España, de que pronto habría levantamientos independentistas en sus colonias.
Me contaron cuando era niña que una de las razones que motivaron a mis antepasados a migrar a Saltillo, era la presencia en la Sierra Madre de “osos negros” y bosques de pinos, esto les traía el recuerdo de sus tierras alemanas en Freiburg. Según me enteré llegaron a adoptar unos oseznos en un rancho que tuvieron en las montañas rumbo a Monterrey.

Se avecindaron en Saltillo, trabajando por temporadas en toda la ruta hasta Real de Asientos en Aguascalientes, atareando la cantera para Iglesias, diversos edificios y casas de hacienda de mineros y ganaderos adinerados. Se hicieron muy preciados por sus técnicas de cortar la piedra y tratar la cantera en toda esa ruta, desde Coahuila a Aguascalientes pasando por Zacatecas y San Luis Potosí, donde hicieron varios encargos, teniendo al final una importante cartera de clientes en toda la ruta, además de hacer talleres enseñando sus técnicas en el trabajo de la piedra.
Quince años vivieron en la capital de Coahuila, hasta que en el año de 1819 recibieron una oferta para irse a trabajar a San Carlos de la Candela, a unos 200 kilómetros al norte. Fundado en 1690 por el general Alonso de León, quien fuera capitán, alcalde de Cadereyta y gobernador del Nuevo Reino de León y de Coahuila. Instauró la Misión de San Bernardino de la Candela con indígenas Tlaxcaltecas.
En 1774 el gobernador Jacobo Ogarte y Loyola da la orden a Joaquín Sánchez Navarro de repoblar esta región que había sido abandonada hacía más de 70 años, con el nombre de San Carlos de la Candela, muy cerca de la Misión. Arriban cuarenta familias españolas que logran consolidar la población. Para el año de 1819 había crecido el número de habitantes y se requerían personas que supieran trabajar la piedra.
Mamita, mi madre querida, mi mejor amiga, nació en el año de 1821 en el preciso tiempo de la consumación de la Independencia.
Contaba mi mamá que había unas aguas termales muy bonitas, muy cerca de la casa. El lugar se llama Ojo Caliente que de gran beneficio le hacían sus aguas a su salud y las que mi madre frecuentaba mucho. Una ocasión me dijo mi madre que una de las condiciones que pusieron mis abuelos para irse a Candela, era si había osos. Así se las gastaban...
A los dos años de nacida me puse enferma de los pulmones tras una fuerte nevada y mucho frio. Doña Fátima, una señora muy cercana a la familia, de origen indígena Coahuilteca de los Rayados, era chamana de muy buena reputación. Me hizo un brebaje con planta de gobernadora (guamis) y ese olor se me quedó para siempre, como si necesitara oler esta planta para sentirme bien, y con una ramita, dice mi madre, me quedaba dormida y no lloraba, como si la planta del guamis me diera sueño y tranquilidad. Además, me daban leche calientita de chiva con sotol, endulzada con miel y batida con chocolate.

Me llevaban mi mamá y la chamana a las aguas termales de Ojo Caliente, aún en los días de frio, y esto me hizo a la larga una niña muy resistente. Recuerdo vagamente algunas imágenes de Doña Fátima, quien tenía unos ojos azules hermosísimos en un rostro apiñonado, lo que le daba una belleza muy particular según me contaba mi madre. La sanadora y curandera Fátima, empleaba una piel de oso negro y unos cuernos de borrego berberisco de la región de Candela, todo en un atuendo que armonizaba con un pequeño tambor de piel de venado y una flauta. Así hacía sus sanaciones con una gran fogata en cada luna llena. Yo siempre andaba con mi ramita de gobernadora.
Mi padre Manuel Azuegonmass, originario de Guadalcázar, San Luis Potosí, fue militar de carrera, llegó a coronel y se quebró a varios gringos durante la invasión de los Estados Unidos a México. También luchó contra los Comanches y cuando yo tenía sólo 3 años de edad, en 1849, fue transferido a Agüitas (como le decía mi papá a Aguascalientes). Aguascalientes se había separado de Zacatecas en 1835, por órdenes de Santa Ana, como castigo a una sublevación de los zacatecanos contra el ilustre y controvertido Antonio López. Se le había encargado a papá estar vigilante con sus tropas, pues algunos inconformes podrían aprovechar el desconcierto a nivel nacional y buscaran regresar nuevamente al estado hidrocálido a formar parte de Zacatecas.
Mis primeras letras las aprendí en Agüitas, en la escuela de Monjas en un Convento que también era internado. Esta orden religiosa era muy devota de la Virgen María de Guadalupe Tonatzin, y mi madre, siendo muy religiosa y devota de las apariciones Marianas, quiso que tuviera educación católica. Ahí aprendí piano, historia, geografía, tejido y repostería. Los años en Aguascalientes fueron muy bonitos y llenos de alegría.

Papá se hizo de una casona en el poblado de Real de Asientos, que conocía desde niño, al acompañar al abuelo en los temas de la piedra y la cantera. Teníamos una huerta, corrales para chivos, puercos, una carpintería y su estudio (como él le llamaba) donde tenía sus libros, una gran mesa de trabajo para sus planos militares, su escritorio y todo lo necesario para estudiar, trabajar y leer. Aprovechó para abrir una ferretería en el centro de la ciudad capital a la que bautizó como “Ferretería La Palma”, con los años, y al no poderla atender por sus ocupaciones en el ejército, se la traspasó a un alemán que había llegado con las tropas de Maximiliano de Habsburgo. Éste, siendo escribano y geógrafo, se enamoró de México y haciendo su base en Aguascalientes decidió quedarse en tierras hidrocálidas. El Señor Aikel, se hizo amigo de papá, acabaron siendo compadres en la feria de San Marcos, en una pelea de gallos, al calor de los tequilas y pulque, se dio la gran amistad. A la muerte del padrino Aikel, le hereda “La Palma” a su hijo adoptivo, protegido y pupilo Manuel Azuela Sarabia, a quien enseñó todas las artes del comercio, importación y exportación, llevar los libros de contaduría y administración. Juntos, me decían, formaron un gran equipo.
Acompañé a papá en alguno de sus recorridos por la región. Las vistas de Real de Asientos eran hermosas y me explicaba cómo este lugar fue parte importante del Camino Real de Tierra Adentro, que iba desde la Ciudad de México hasta Santa Fe, Nuevo México, pasando por Zacatecas, Durango, Chihuahua, Paso del Norte, en los límites norteños del Virreinato. Mi padre, era un erudito en historia y geografía, me enseñó a leer los mapas y a orientarme con la brújula, el sol y las estrellas.
Papá es Transferido a Perote.
Vivimos en Aguascalientes hasta enero de 1861, año en que papá fue nuevamente transferido, ahora a la Fortaleza de San Carlos en Perote, haciendo frecuentes recorridos a Xalapa y al Puerto de Veracruz como parte de sus tareas. Los primeros días en Perote en aquel año, vienen a mi memoria porque ahí descubrí que ya era una señorita. No me asusté, pues mi mamá me indicó que era muy posible que pronto tuviera un sangrado, pues hacía un año que comenzaba a desarrollarme y sentía cómo mi cuerpo cambiaba semana a semana. Un rojo atardecer muy hermoso, fue testigo de verme y sentirme como una señorita. Ese mismo día nació mi cuerpo. Nunca lo olvidé...
Mi padre pronto se relacionó en la región y apostó por una panadería y como gustaba del campo, le entró con un socio a unos corrales para la cría de borregos y chivas para barbacoa. Todos trabajábamos con ahínco y dicha. Además, yo daba clases de piano e historia.
Conservamos la casona y la granja en Real de Asientos, lo que sería excelente decisión dados los tiempos tan complejos que se vendrían en el país.
Corría el mes de abril de 1861 y la noche del viernes diecinueve, el gobernador de Veracruz, el Licenciando Don Fernando de Jesús Corona y Arpide, ofreció una espléndida recepción a los militares asignados en el Estado. Mi padre fue invitado a esa cena baile en el Puerto de Veracruz, y decidió que ya era momento de presentarme en sociedad. Asistí ataviada con un vestido de mi abuela que mi madre guardaba para cuando ya fuera una señorita.
Estaba sentada al lado de mi mamá, cuando de otra mesa se acercó un joven, era buen mozo, gallardo me tomó de la mano invitándome a bailar. Mis piernas temblaban de los nervios, miré a mi madre quien asintió que bailara y mi padre dio su visto bueno, observando vigilante sin perderme de vista.
Salimos al malecón a caminar bajo la luna, que iluminaba el mar veracruzano. Fue amor a primera vista, nos abrazamos y él, mi subteniente me dio un dulce beso, profundo, suave, que hizo que el tiempo se detuviera y sin darnos cuenta, había pasado más de una hora, por lo que regresamos al salón. Papá y mamá estaban baila que baila y sin hacerme ninguna reclamación, mi padre, haciendo uso de su acostumbrada mesura, prudencia y de la confianza que tenía hacia mí, no dijo nada, solo me susurró…
- ¿Estás enamorada hija mía? Y guiñándome el ojo me dio un dulce beso en la frente.
Mamá me tomó la mano. Y me palmeó la espalda, aprobando mi buen gusto.
Xico se acercó a mis padres para presentarse formalmente y pedir permiso de irme a visitar a Perote.
-Joven, le dijo mi padre, usted es bienvenido, sólo que sus visitas serán bajo la vigilancia y tutela de mi esposa. ¿Está de acuerdo Subteniente Martínez? Huelga decir, que cuando vaya a Perote, se reportará a la Fortaleza de San Carlos. Ahí solicitará verme y yo le daré los salvoconductos para que pueda pernoctar ¡En la Fortaleza y vigilado! ¿Estamos de acuerdo?
-Sí, sí, por supuesto señor coronel. Tenga seguro que honraré la confianza que ustedes han depositado en mí. Me siento honrado. Coronel, señora, señorita Carmelita, me retiro y quedo a sus pies, al tiempo que besaba su mano. Ambos cruzamos miradas, sonrojados y animados, sabiendo que estábamos iniciado una gran historia de amor.
Por la invasión francesa regresamos a Real de Asientos.
El jueves 24 de abril, un día después de haberme despedido de Xico, papá nos pidió tuviéramos reunión familiar urgente.
Mi padre, directo y sin rodeos, más en este tipo de situaciones, nos pidió empacáramos lo más pronto posible y llevar lo que más pudiéramos, pues saldríamos en la madrugada del lunes hacia Real de Asientos. Había enviado una carta unos días, antes donde notificaba a sus buenos amigos y compadres, Adrián Venzor y Toño García Luna, quienes era autoridad regional en esa zona de Aguascalientes; de manera urgente, que, ante la gravedad de los avances del ejército francés apoyados por las conservas, nos devolvíamos a tierras hidrocálidas a la mayor brevedad.
Papá nos llevaría a Agüitas, hasta vernos bien instaladas y a salvo en la casona de Real de Asientos.
La situación era caótica, y no sólo había que cuidarse de los franceses, sino también de los conservadores que no dudaban en traicionar a sus propios compatriotas con tal de denostar y ver derrotados a los liberales.
La estrategia de papá fue brillante: los objetos, como el piano que desarmó, las camas, muebles, pinturas con nuestros retratos, libros, mapas, vestidos, trastos, etc., serían enviados en unas carretas viejas guiadas por militares, aparentando ser comerciantes, vestidos de manera que no llamaran mucho la atención. Mientras que nosotros, saldríamos en una formación de trueno, como lo llamó papa. Seríamos catorce militares y la familia, saliendo a trote rápido. Nos instruyeron sobre qué hacer en caso de ser asaltados y que por alguna situación nos tuviéramos que separar. Los objetos grandes ya fueran de mucho valor o poco valor, se iban en las carretas con la bendición de Dios y nosotros con nuestras alhajas, monedas de oro y plata y por supuesto bien armadas con rifle y una pistola. En mi niñez, papá me enseñó a disparar, y hasta con el arco y flecha hice algunas presas. En Real de Asientos me mostró cómo guiarme por el sol, y en la noche con las estrellas.
Mi padre era muy perceptivo y tenía un olfato muy especial para intuir por qué camino y qué brechas tomar, a qué horas, y así, se decidió por Altotonga, Tlatlauquitepec, Zacatlán hasta Tulancingo y de ahí a Pachuca, donde nos quedamos unos días, en los que papá recababa información del movimiento de las tropas de los franchutes y conservadores y qué rutas serían las más seguras. La ciudad me pareció hermosa y con mucho aire. Nos informaron que la ruta más segura seria por Real del Monte y así nos pusimos en marcha. Unos mineros ingleses y sus descendientes, que no veían con buenos ojos a los franceses, le mandaron a decir al coronel Azuegonmass que tenían rifles, pistolas y balas que venían directamente de Inglaterra y que eran de mucha mejor manufactura que las armas francesas.
En Real del Monte, probé el que sería desde ese momento uno de mis manjares favoritos: los pastes. Mamá y yo comimos tal cantidad de pastes de carne con papa, frijoles, pollo con mole, frutas, chile, etc. Papá, terminó por comerse más de veinte en un solo tiempo. Unas señoras muy gentiles nos permitieron entrar a su cocina y aprender cómo se hacía este delicioso manjar. Nos llevamos más de 500 pastes de carne, chile, manzana, fresa y piña, pero los que más me gustaron fueron los de carne con papa.
Las esposas de algunos descendientes de los primeros mineros que llegaron entre 1825 y 1826, nos dijeron que ellos, los ingleses, trajeron el paste y que se llamaba “cornish pasty” y que los lugareños lo empezaron a mexicanizaron no solo en sus sabores, sino en la pronunciación, al decirle simple y llanamente paste.
Bien repuestos, igual los soldados, más gordos pero contentos, con sus alforjas llenas y repletas de pastes, además, con rifles y pistolas inglesas de mejor calidad, salimos rumbo a Huasca, cruzamos por bosques interminables hasta llegar a Meztitlán, con un paisaje de desierto de gran belleza. Probamos el mejor pulque que hayamos degustado. Y la gente lo hacía de diferentes sabores, también su barbacoa era deliciosa. Nos prepararon un venado bañado en pulque de tuna, aquello fue insuperable.
Noté que, al seguir nuestro camino hacia Zimapán, papá estaba bordeando la Sierra Madre y de ahí seguiríamos con gran cautela. En un giro inesperado, le informaron a nuestro coronel que los conservadores estaban vigilando los caminos, por lo que bajamos de Zimapán a Huichapan. Nuestros guías a partir de Pachuca eran en su mayoría Otomíes, y siempre me parecieron recios, muy fuertes, de piernas poderosas, bien formados al igual que sus mujeres hermosas, expresivas y muy intuitivas, como si te leyeran el pensamiento, eso me llamó la atención.
Al llegar a Huichapan fuimos recibidos por el teniente Mario Enrique Berrospe, un militar de gran fuerza física que nos alojó durante algunos días, pues el tránsito desde Zimapán había sido muy intenso y desgastante.
-Descansen y recarguen fuerzas, tenemos un amplio bodegón con más de veinte camas para la tropa y usted mi coronel y su familia pernoctarán en mi casa.
-Hija, ven por favor.
-Dime padre.
-Te presento al coronel Don Manuel Azuegonmass, con quién coincidí y fui compañero hace muchos años en la Academia Militar. Su esposa, la señora Ana Cecilia y su hija Carmela.
-Carmela Azuegonmass Weltzien Buchoolz a sus órdenes coronel. Muy agradecida por su hospitalidad y finezas hacia nosotros y los soldados que nos protegen.
-Carmela, tu padre es como un hermano en mi vida. Atzin hijita, por favor hospeda a Carmelita en tu recámara.
-Claro que sí. Carmelita, ven te presto ropa y te preparo un baño bien caliente.
-Mi hija es pintora y cuando pase la guerra, le buscaré un lugar en la Ciudad de México, para que se prepare con los mejores pintores, pues es su deseo. Nuestras hijas se harán buenas amigas.
Les comento, en la madrugada del 16 de septiembre de 1812, en el Chapitel, una casona muy bonita de dos niveles y un balcón, se dio por primera vez, ya a modo de celebración, el Grito de Independencia, el 16 de septiembre de 1812. Esta era una zona de resistencia y yo creo que mis Generales Ignacio López Rayón y Andrés Quintana Roo, andaban contentos y cómo no, con la comida, el pulque, el mezcal y los manjares que tenemos aquí. Es más, se les unió un paisano José María “Chito” Villagrán. Total, que tomaron la campana, llamaron a la población y dieron su Grito de Independencia, los muy cabrones.
Bueno, vayamos a descansar y mañana les muestro Huichapan.
-Huele este perfume Carmelita, te gustará mucho. Mañana te llevaré a nuestras Iglesias de San Mateo y del Calvario, te van a gustar mucho y al Chapitel para que veas donde fue el primer grito de independencia.
-Gracias Atzi, seremos amigas por siempre. Y sellaron su nueva amistad con un afectuoso abrazo. Mañana que vayamos al centro, y frente al Chapitel, y a la Parroquia de San Mateo, te hago dos dibujos con carboncillo para que te los lleves de recuerdo.
Al día siguiente nos consintieron con la mejor barbacoa que hayamos probado, tortillas gruesas y enormes, con deliciosas y picantes salsas, acompañado todo de pulque a carretadas.
-Mi coronel y querido amigo de armas, de aquí a San Juan del Río está despejado, y así estará los siguientes días, así me lo han informado. De todas formas, te asignaré veinte soldados más, bien armados y con pertrechos para el camino y para estarse allá una temporada. Además, haré que preparen dos carretas, blindadas con doble madera, y unas placas de acero como protección para tu familia. Hasta un pequeño cañón les montaré en la segunda galera.
Me comentas que mandaste unas carretas desde Perote, cuando tenga noticias de su llegada a San Juan del Rio, te mando a avisar con los estafetas que tenemos y que vuelan con sus caballos. ¡Vaya que son buenos, esos muchachos! El camino de aquí hasta Aguascalientes es más transitable por los amplios valles y los caminos están en buen estado. Que los vean con más soldados, espantará a los conservadores.
Llegan a Real de Asientos, en Agüitas.
Con grande bendición llegamos el 22 de mayo a nuestro destino final, tras un mes de camino, haciendo paradas hasta por tres días, escondidos. Con dos enfrentamientos en el trayecto, de los que salimos bien librados, ahuyentando a los conservadores que nos habían hecho afrenta, que se hacían apoyar por mercenarios y algunos franchutes que ya se encontraban guerreando en el altiplano central.
Las noticias llegaban y daban cuenta de la gran victoria del ejército nacional de México, en Puebla, bajo el mando del General Ignacio Zaragoza, dando un duro golpe a la supuesta invencibilidad del ejército galo, que tenía excelente armamento y soldados experimentados de guerras en Argelia y Crimea.

Las carretas con todas nuestras pertenencias habían llegado una semana antes. Entre los bastimentos venían diez grandes costales de yute con café que nosotros tendríamos que tostar y moler. Recuerdo cómo saltaba descalza sobre las semillas de café ya tostado y su olor me embriagaba. El primer destilado de café que obtuvimos, lo celebramos en familia, preparándolo con leche bronca, que yo misma ordeñé. En esa ocasión hicimos dos jarras de pajarete, a las que les pusimos mucho tequila, en cantidades de pecado. Y así, montados en mulas y yeguas, subimos a la parte alta de Real de Asientos, a ver el atardecer. Cuando acordamos, Chito, el capataz, nos fue a despertar en el hermosísimo amanecer. Ahí mismo nos preparó café de talega, bien cargado, y frijoles charros, con carne de cerdo, tortillas y salsa bien picante. He de reconocer en estas mis memorias y querido diario que, en Real de Asientos, me volví adicta al tequila, al pajarete y al café. En no pocas ocasiones, a escondidas, fui por mi botella de tequila, mi leche y mi café con miel, y me iba en mi viejo caballo percherón, El Canelo, a ver las estrellas. Y en no pocas ocasiones también, me pasé de tequilas y me quedé dormida envuelta en mi jorongo ante los bellos atardeceres que se ven, se sienten y respiran en Real de Asientos.
Nuevamente llegaba al lugar donde aprendí a leer, a montar a caballo, a ver las estrellas y despertarme frente a la fogata en los fríos amaneceres de invierno cuando acompañaba a papá a cuidar las chivas en el monte. Esos desayunos que hacía papá a base de huevos rancheros con tortillas de maíz, salsa mexicana y acompañados de mi acostumbrado pajarete. Toda mi niñez se me venía encima de un solo tajo. Regresaba a mi Real de Asientos, en mi Agüitas . . .
En esta vuelta a Aguascalientes, ya era yo toda una señorita comprometida y muy enamorada, y me sentía grande. Aun así, mi mamá, quiso que retomara algunos estudios y también que ayudáramos a las monjas a dar clases a sus pupilos. Preparábamos los lonches, un litro de “pajarete”, nos subíamos en la carreta, y así todos los días, asistíamos gustosas a apoyar a las hermanas religiosas.
En octubre de 1863 y preparándonos para recibir los fríos del otoño, nos sorprendió la llegada de los compadres de papá, los Regidores Antonio García Luna Martínez y Adrián Venzor Vargas. Ellos se habían encargado del cuidado y protección de la casona durante los años de nuestra estancia en Perote.
-Compadres Toño y Adrián, les gritaba Manuel. ¿Cómo están? Vengan a que les abrace queridos hermanos y muy grandes y afectos amigos.
- ¿Qué sucede que vienen tan alterados? Pasen y nos tomamos unos tequilas con ponche que han hecho mi esposa y mi hija.
-Con la noticia compadre, que la Ciudad de Aguascalientes fue ocupada por fuerzas francesas, y las guerrillas de los reaccionarios del Gallo y Sierra Fría, irrumpieron ya la capital. Sin muertos ni bajas. Pero obligaron a nuestro amado gobernador, Don José María Chávez, a entregar nuestra querida capital y a abandonarla. Y pa acabarla de chingar, Juan Chávez, que es un malvado, será el nuevo gobernador por imposición de los franceses y de las conservas.
Venimos para avisarte que nos unimos al Escuadrón de Lanceros, que están organizándose aquí en el estado y en Zacatecas.
Manuel se mesó los cabellos y convencido de tener que ayudar a articular la causa liberal, les dijo a sus compadres Adrián y Toño que él también se uniría al Escuadrón de Lanceros.
-Denme tres días compadritos para hacer todos los arreglos, dejar instrucciones a la familia, mi testamento, dejar unos quince de mis leales soldados y a los dos más cercanos lugartenientes, aquí en la Casona.
-Compadre, también veníamos a pedirte que pudiéramos dejar aquí a nuestras familias mientras vamos a la guerra. Allá en el rancho y en la sierra estarán más expuestas nuestras viejas y los escuincles.
-No faltaba más, la casona es en verdad grande, con muchos cuartos y lugar para los caballos. Podemos ampliar los corrales pa que cada quien traiga a sus marranitos, chivas y borregos. Somos compadres y para éstas estamos.
Traigan a sus familias lo más pronto que sea posible, ahorita mismo le doy instrucciones al capataz Don Chito, para que se vaya con dos carretas y algunos vaqueros a arrejuntar a las chivas, borregos, cargar los marranos y canastones pa las gallinas y gallos. Y otra más para los enseres de sus señoras y los chamacos.
Al día siguiente, las esposas de Toño, Alejandra Martínez Castañeda, con sus dos pequeños, Toñito y Alejandrita y de Adrián, Yajaira Parra y su hijita Dayra; llegaron para instalarse en la Casona. Ana Cecilia y Carmelita, les recibieron con mucho afecto. Le dieron a cada familia sus habitaciones, a sus caballerangos también.
-Don Chito.
-Sí, Don Manuel, diga usted.
-Por favor tengan mucho cuidado con los gallos el Morelón, el Yaqui y el Demoledor. Ya ven que mis gallos derrotaron a los de este tipejo, Juan Chávez, en la pasada Feria de San Marcos. En el último palenque juró acabar con nuestros gallos.
-Y recuerde patrón, decía Don Chito, no se olvide cómo le hizo tirria al Juan Chávez malvado, el que nuestro toro Nicolás, que salió bien chingón, le metiera santa picada al torero amiguito del mentado Chávez, que ya casi lo andaba visitando la calaca. Y pos esto alebrestó más a los contras, jijos de la chingada. Ni quien pensara que este hijo de la chingada sería el gobernador. Hasta juró acabar con nuestros gallos que les partieron la madre a los suyos.
-Chito, por favor avísales al chamán Rafael, al diácono Juan Manuel y al tío Jorge el jakhasio, para que estén listos y traigan ya a sus familias y pertenencias aquí a la casona, que será como un fuerte donde resistiremos cualquier ataque.
El chamán Rafael, un indio Otomí de 65 años, que había llegado con las carretas que venían desde Perote y fue incorporado a la caravana en Huichapan, se adaptó muy rápido a la vida de Aguascalientes. El teniente Mario Enrique Berrospe, le asignó al curandero la misión de cuidar y velar por su gran amigo Manuel Azuegonmass.
El Chamán no tardó en entablar amistad con el diácono Juan Manuel, notando en Manolo, como lo llamaría afectuosamente, los dones y poderes que le hacían transmutar hacia el jaguar, el oso y el lobo. Ambos ayudaron, y en mucho, a la recuperación de los tres compadres que, de no haber sido por ellos, habrían fallecido por las heridas infringidas por los Suavos en Zacatecas en la batalla en Jerez, un mes más tarde. Rafael no tardó en conocer las plantas medicinales de la región, los cerros y los animales de poder que serían sus aliados para sanar y curar.
Siempre me gustó ver las ceremonias que hacían el diácono Juan Manuel, el Jakhasio tío Jorge y el chamán Rafael. Aprendí mucho de ellos dos y hasta la gente empezó a hacer leyendas e historias de ellos, viéndolos como animales salvajes, como osos o lobos y búhos sabios vigilantes de toda la comarca.
El Jakasio, como le decían al tío Jorge, había llegado junto con Marina, a la región de la mano de Juan Manuel…
Chávez bueno vs Chávez malo. Los Jesuitas Pedro, Juan Carlos y el Diácono Juan Manuel.
La capital Aguascalientes fue evacuada y el Gobernador José María Chávez, partió en dirección a Malpaso, ya en Zacatecas. Ahí los franceses apoyados por los conservadores mexicanos les esperaron, pues ya habían tomado el pueblo. Decidieron cambiar el rumbo e ir en dirección a Jerez, lugar en el que al final fueron derrotados. José María Chávez, el gobernador legítimo, fue hecho prisionero a manos de los franceses en Jerez.
En un Consejo de Guerra amañado, y sin un juicio honesto y leal de acuerdo a la investidura del Gobernador, y violando toda legalidad, lo condenaron a muerte. La gente quedó muy indignada por este hecho, pues era un excelente gobernador y buen hombre. Aun así, y pese a las peticiones populares para que le perdonaran, fue fusilado el 5 de abril de 1864.
En una carta dirigida a su esposa Néstora Pedroza, un día antes de ser fusilado, le dedicó estas palabras: Hermosa, digna y la más bella entre todas las mujeres, de quién me enamoré desde la primera vez que te vi. Mi amor, mi esposa amada, me despido con estas letras en las que quiero que sepas que: “Yo muero por haber intentado defender la Independencia de mi patria; no creo haber cometido una falta”.
El Chávez malo, Juan, fue gobernador de Aguascalientes por orden del general Bazaine quién luego lo quitaría para quedar él mismo en el puesto. Tenía fama de tener una moral muy laxa en tema de dineros. Muy religioso desde niño, lo que no le sirvió de mucho, pues sólo estuvo de diciembre de 1863 a febrero de 1864 “El manifiesto de Juan Chávez durante su etapa de jefe político del Estado fue: [“Viva la Religión, viva la regencia del imperio”] con lo que se había propuesto devolver a la religión su prestigio”.
Mi padre me contó que salieron a apoyar al gobernador legítimo José María Chávez, con los Lanceros, soldados y valientes voluntarios en las poblaciones de Malpaso y Jerez.
Los tres compadres, fueron guerreros extraordinarios luchando con valentía, arrojo y determinación. Manuel, más liviano, hizo gala de su extraordinaria puntería y manejo de la espada, y con gran maestría, varios invasores fueron enviados a mejor vida por el valiente coronel Azuegonmass. Toño y Adrián, cuya fiereza era la de dos enormes osos negros que arremetían aprovechando su enorme fortaleza y volumen físico, aplastaron cráneos como si fueran mazorcas. Habían hecho unas formidables guantéelas que les quedaban amplias, reforzadas de bronce con filo en la carátula interior y retoques de hierro en los nudillos para los golpes y unas como puntas en las palmas. Minutos antes de la batalla, se colocaron sus guantes preparados y así, a puño limpio, dieron cuenta al menos de más de diez franchutes y tres conservadores. Usaban unas cueras de triple piel, con algodón entre cada una de las capas, lo que les permitió resistir los embates enemigos con eficacia. De esa primera batalla en Malpaso regresaron ilesos a la casona.
A los días se trasladaron hasta Jerez, donde dieron fiera pelea a los invasores que, apoyados por los conservadores, habían sumado más soldados. Los Liberales fueron muy valientes, pero al final perdieron la batalla con consecuencias terribles para la salud de mi padre y la situación familiar. Donde la puerca torció la cola, fue en la lucha cuerpo a cuerpo contra los Suavos, que eran los soldados de élite del ejército francés. Fueron estas milicias de élite, las que hirieron a los tres compadres. A mi papaíto le dieron un balazo en la rodilla que casi le provoca que se la amputaran, además un corte en la cara que lo dejaría marcado de por vida y un piquete de bayoneta en el estómago, que afortunadamente y por las cueras reforzadas que usaban, sólo logró penetrar un tantito y pese a lo escandaloso de la sangre, no llegó a ningún órgano. El compadre Adrián Venzor, recibió un balazo en la mano y otro que le destrozó la clavícula, además de un piquete de bayoneta en el muslo. Al compadre Toño, una bala le impactó en el antebrazo derecho y también un piquete de bayoneta en la nalga derecha, que casi le deja inválido, pues estuvo a sólo un centímetro del nervio ciático.
Adrián Venzor estaba lidiando con dos de estos Suavos, cuando un tercero le llegaba por la espalda y a unos centímetros de clavar la filosa daga de la bayoneta en la humanidad del valiente compadre, sucedió un auténtico milagro: El diácono de la Parroquia de Real de Asientos, Juan Manuel Domínguez, saltó con la fuerza de un jaguar, blandiendo al tiempo un filoso y robusto florete español y una espada katana, manejados con gran destreza. El pobre atacante francés, no supo ni por donde le había llegado su hora final, siendo desmembrado en tres porciones en menos de un minuto de lucha.
- ¡Gracias, Juan Manuel! Te debo esta y mil vidas más ¡Ayúdale a Toño, que estos chuavos de la chingada le están echando montón! ¡Asu, cómo me duelen estas jijas heridas! Deja tomo un trago de mi tequila, que siempre cargo mi anforita. ¡Virgencita de Guadalupe, ayúdanos a salir de esta!
- ¡Aguanta, Toño! Ahí les voy cabrones, gritaba con fiereza Juan Manuel blandiendo su florete y katana…
El Diácono y su transitar.
El diácono de la Parroquia Juan Manuel Domínguez, llevaba en Real de Asientos ya un tiempo considerable, ayudando y apoyando a los sacerdotes y párrocos jesuitas Pedro y Juan Carlos, quienes le habían llevado consigo desde la Ciudad de México, donde se habían conocido. Acapulqueño de nacimiento, pero de padres Tlaxcaltecas, desde niño escuchaba a su abuelo que había llevado a su familia a vivir de Santiago Tepeticpac, Tlaxcala, al puerto de Acapulco. A los 15 años se inclinó por la carrera eclesiástica e ingresó al seminario. Siendo novicio, tuvo muchas inquietudes y deseos de recorrer el mundo. Con mucha suerte fue aceptado en uno de los barcos que hacían el recorrido desde el puerto acapulqueño hasta Manila en las Filipinas, en las rutas que eran la cauda final del otrora Galeón de Manila. Se internó en las islas filipenses y por azares del destino llegó a China, de ahí bajó a Tailandia, para luego subir al Japón e internarse hasta Jakhasia, en la Siberia rusa.
En estos países estuvo catorce años, viajando, experimentando y predicando la fe Católica Guadalupana, como él decía. Estudió, leyó, escribió y, además, aprendió a pelear boxeo tailandés y kung fu chino. A los diez años de haber vivido en estos países, se embarcó al Japón arribando a la isla de Okinawa, donde conoció a un monje que iba hasta la isla de Hokkaidō. Con él aprendió nuevas técnicas de un arte marcial llamado karate y en especial el manejo de la espada y otras formas de expresión del confucionismo y sobre todo aprendió a sanar con las manos, haciendo meditación, oración e imposición de manos sobre los riñones con una técnica que se llamaba “Jeoi” apoyado con una medalla bañada en oro, acompañada de ceremonia de té y oraciones muy profundas. El maestro Akira Sakai, mostraba el camino a Juan Manuel, del cómo sanar, pasando por nueve puntos vitales del cuerpo de las personas que recibían esta técnica. Akira Sakai, era un monje que iba en busca del Leopardo de la Nieves, cuya sabiduría le sería revelada al llegar a los grandes Megalitos, con los que soñaba recurrentemente. Invitó a Juan Manuel a seguirle, viajando hacia el interior de Siberia.
Me contaba Juan Manuel, el diácono, que esa región de Siberia había sido ya conquistada por Rusia, hacia el año de 1708 y que tuvieron que pasar por varios fuertes con soldados rusos que interactuaban muy bien con las culturas originarias de Jakhasia, que estaban divididos en varios grupos habitando enormes extensiones en un territorio en verdad hermoso, lleno de interminables llanuras, estepas, bosques, ríos y una cultura milenaria.
Estuvieron tres años conviviendo profundamente con los chamanes jakhasios, aprendiendo de ellos sus técnicas sanadoras, su cosmovisión y ritos en las Estelas y Megalitos sagrados. Fueron muy bien aceptados y se integraron muy bien a estas comunidades.
En una visita a las Estelas y Megalitos, por fin vieron la señal que el maestro Sakai había esperado con tanto anhelo y deseo por décadas de ensoñación: un imponente leopardo de las nieves, acompañado de dos hembras y varios cachorros, les estuvieron rondando a escasos metros durante una hora, hasta que el macho se acercó a Akira, quien extendió su mano, la que el magnífico felino olfateó, y sobre la que colocó su enorme garra. Minutos después, caminó hacia Juan Manuel a quien le lamió el rostro y puso su garra en su cabeza, como si le bautizara. Caminó cauto entre ellos, les miró y con un suave ronroneo se despidió, alejándose con su familia, perdiéndose entre la niebla y una suave nevada. . .
-Es la hora Juan Manuel, es el tiempo que sigas tu camino, que yo seguiré al gran felino de las nieves.
-Pero maestro, yo quiero seguirle a usted.
-No, Juan Manuel, es hora que nos separemos. El gran felino de las nieves se ha manifestado y se cierra el ciclo. Así es la vida. Has sido un gran estudiante. Pero ven, hagamos una fogata para dar gracias por haber visto y ser aceptados por el gran leopardo blanco.
Se acercaron los chamanes con sus familias, y juntos hicieron una mística ceremonia de despedida, cierre de ciclo y apertura al nuevo horizonte. En este rito, el maestro Akira Sakai, le entrega a Juan Manuel su espada Katana y la medalla de oro para sanar mediante Jeoi. Los chamanes le entregaron unos regalos, entre estos una hermosa mujer y un asistente, que era tío de esta joven y hermano de uno de los chamanes principales.
Juan Manuel conoce la ortodoxia en Jakhasia
Habían pasado algunos días de caminar por las enormes llanuras de la Siberia cuando vieron a lo lejos una pequeña ermita de madera, de la cual se dejaba escuchar el animado sonar de una campana. Un monje que alimentaba a las cabras y ovejas, les divisó entre la ventisca y volvió a sonar con mayor fuerza la campana. De la ermita salieron otros dos monjes y los tres fueron al encuentro de los viajeros, a los que invitaron a pasar a la tibia habitación, les sirvieron fresca leche de cabra, pan, queso y una sopa muy caliente hecha a base de verduras.
Tras pasar unos días, Juan Manuel y sus dos acompañantes empezaron a ayudar a los monjes en distintas tareas. El monje Nektarios, al enterarse que Juan Manuel, por sus propias pláticas, tenía estudios religiosos, le invitó a quedarse con sus acompañantes una temporada con ellos, pues quería compartirle algunas enseñanzas de la religión ortodoxa.
Estos monjes ortodoxos de la tradición rusa, ya tenían tiempo misionando en esas lejanas tierras y aisladas comarcas. Con ellos convivieron y Juan Manuel tomó clases y tuvo la oportunidad de estudiar durante dos años. Ahí, en el pequeño pero hermoso Monasterio de madera, decorado bajo la estética de las iglesias y monasterios ortodoxos aprendió, y mucho.
Me comentaba Juan Manuel que tuvo que ajustar algunas de sus creencias. Así empezó una transmutación muy fuerte en su interior. Comprendió, bajo una lógica de análisis, las diferencias de forma y fondo entre la fe católica romana y la ortodoxia. Aprendió a razonar desde otra lógica. Su crecimiento espiritual fue muy profundo y se manifestó en él para el resto de su vida.
El razonamiento profundo, la mesura y la disciplina en la intención del pensamiento, desde la oración misma, fueron catalizadores que pudo exponenciar, en el manejo del perdón, que, en la lógica ortodoxa, es una oportunidad de revertir en energía de luz y justicia, todo agravio.
La oración, como fuente inagotable de fuerza hacia el interior del alma misma, revierte el mal en bien. Ésta genera la fuerza que le permite al individuo lograr los objetivos trazados en un estado de gracia, al acompañar lo material, del paraguas espiritual, que viene desde la fe que otorga el mismo Dios.
Se derrota al mal que puede manifestarse al interior, como el ego o el deseo de venganza, con una disciplina espiritual, mental y física. Al templar el carácter y la voluntad, se evitan las trampas que se manifiestan contra la fe y la esperanza. Además de la oración y la contemplación, están los ayunos que fortalecen y permiten dominar el deseo que se manifiesta en el plano del cuerpo físico y el mental. Por tanto, el enemigo externo, también es derrotado al tener el practicante ahora piadoso, una fe y esperanzas fuertes, y bases más sólidas como creyente.
Juan Manuel siguió y aprendió del Monje Nektarios, quién sería una de las personas que más trascendería en su vida.
Los monjes Nektarios, Georgij y Bogolep, platicaban mucho con Juan Manuel sobre temas de filosofía y teología, explicando al ex seminarista, las sutiles diferencias en forma y fondo entre la teología católica romana y la católica ortodoxa. Juan Manuel, se preguntaba por qué el tránsito de las almas, en su recorrido como humanos encarnados, era tan complejo viviendo situaciones a veces inexplicables, a lo que los monjes le platicaron: a un hombre que se postraba ante Dios y le cuestionaba ¿por qué me has tratado tan mal, si yo no te he traicionado y he sido hombre de bien y ahora sufro hambrunas y tragedias en mi vida?, Jesucristo le respondió: hijo yo te he puesto muchas pruebas, has vivido muchas cosas y transitado un gran desierto que te ha hecho fuerte, digno y ser quién eres ahora. Pronto verás un Edén, porque ese esfuerzo y las lágrimas derramadas, te habrán de generar grandes bendiciones, que se convertirán en porvenires llenos de frutos y albricias.
En el tiempo que Juan Manuel vivió con el padre Nektarios y los monjes, también involucró a la que ya era su compañera, y a quien habían bautizado junto a su tío en la fe ortodoxa con los nombres de Marina y Jorge. Crecieron mucho en todos los aspectos y Juan Manuel era ya producto de muchas creencias y ritos que acrecentaban sus dones, los que se multiplicaban haciendo eco a las enseñanzas de la Biblia. Tras larga temporada, como toda enseñanza, cumplió su ciclo. Este largo período llegaba a su fin, por lo que el archimandrita les fue preparando paso a paso hasta que estuvieran listos y pudieran migrar a tierras aztecas
El otoño y el largo invierno ruso sirvieron de preparación. Tuvieron tiempo de seguir trabajando en lo espiritual y material y en este lapso, Juan Manuel pudo divisar nuevamente al gran leopardo de las nieves.
La primavera y el verano, eran las estaciones y el momento de partir hacia el Este en dirección al océano Pacífico, aprovechando que los caminos serían transitables, por lo que planearon su viaje para esas fechas. La meta era llegar al puerto que unos años más tarde sería nombrado como Vladivostok, y que desde el siglo XVII, en el año de 1689, ya prestaba sus servicios en la transportación naviera de bienes y personas. En 1858 se vuelve parte de Rusia por el tratado de Aigun. Y es hasta 1860 que Vladivostok es bautizado como tal y su nombre significa “Señor de Oriente".
Una tarde de primavera llegó la fecha de emprender el viaje a México
Esa tarde primaveral que enmarcó la despedida, estuvo acompañada de muchos sentimientos, nostalgia, alegrías y tristezas encontradas. Así besando la mano del Monje Nektarios, Juan Manuel se despidió llevando una cruz ortodoxa bendecida, y viendo hacia el Este en dirección a Alyeska (palabra aleutiana que significa "gran tierra", que era territorio ruso y después sería comprado por los Estados Unidos en 1867, llamándole definitivamente Alaska.), se enjuagó sus lágrimas, sabiendo que nunca volvería a ver a sus queridos monjes. Prefirió no ver atrás, pero él sentía que estaban ahí sus amados religiosos despidiéndolo. Ellos también se encontraban conmovidos, pero sabedores que habían cumplido la obra de Dios de la mejor manera posible al hacer de Juan Manuel un mejor ser humano.
En el contingente que se había armado rumbo a América, iban cinco monjes ortodoxos que irían a Alaska a misionar, enviados desde Moscú. Habían llegado por unos días al pequeño Monasterio de San Jorge Mártir a recargar fuerzas, entregar cartas preparadas por el mismo Santísimo Sínodo, desde la capital del imperio, y también con algunos hermosos Íconos de la Virgen de Kazán, uno de estos le sería obsequiado a Juan Manuel. Además, acompañarían al contingente diez comerciantes de pieles con sus familias, fuertemente armados. Recuerdo que Juan Manuel, me había platicado que Pedro el Grande había sustituido a los Patriarcas, que eran como el Papa Romano, por un Santísimo Sínodo en 1721 y que fueron restituidos por Los Patriarcas en el siglo XX.
El diácono regresa a México y conoce a los Jesuitas Pedro Joaquin y Juan Carlos Zamorano.
Regresó al puerto de Acapulco tras catorce años de estancia en tierras asiáticas. Después de descansar una temporada y estar con sus seres queridos, instalar a Marina, su mujer, y al tío Jorge, con su familia; determina retomar sus estudios en Teología, viaja a Chilpancingo e Iguala para pedir orientación. Unos sacerdotes le recomiendan que siga su preparación con la orden la Compañía de Jesús. Los Jesuitas habían regresado en mayo de 1816 a tierras mexicanas. Así contacta a los hermanos Pedro Joaquín Coldwell y Juan Carlos Zamorano Unanue. Ambos, oriundos de San Sebastián, en España, habían estudiado y reparado en la universidad de Salamanca. Además de brillantes filósofos y teólogos, estudian jurisprudencia, siendo apasionados por la historia, la geografía y las culturas pretéritas a la formación de la Nueva España.
Los Padres Pedro y Juan Carlos, al llegar a las costas del puerto de Veracruz, quedan maravillados y al ir subiendo hacia Xalapa y Puebla se van enamorando de estas tierras. En la Ciudad de México, les ordenan trasladarse al occidente del país y es en Guadalajara, donde el Obispo Diego de Aranda y Carpinteiro les asigna misionar y seguir la obra de Jesucristo en el poblado de Real de Asientos, en el año de 1851, donde grande labor habrán de hacer en el nombre de nuestra santa iglesia católica.
En una emotiva cena en la casa obispal de Guadalajara, su excelencia el Obispo Diego de Aranda y Carpinteiro, les expresa:
-Es una Bendición que nuevamente la Compañía de Jesús este entre nosotros y reconozco la gran labor del Papa Pío VII al restaurar en 1814, la magna obra que realizaron y están volviendo a realizar, al serles devueltas sus facultades dentro de la Iglesia Católica Romana. Siempre sostuve y lo sostengo hermanos Pedro y Juan Carlos, que ustedes los Jesuitas fueron injustamente expulsados de Nueva España en 1867, pero afortunadamente este equívoco tuvo su remedio.
Espero mucho de ustedes en su nueva tarea, pues esa región de Aguascalientes tiene mucho trabajo por hacer.
-Vuestra Excelencia, cuente usted con nuestra acción en favor de este lugar al que usía ha tenido a bien asignarnos, comentaba el Padre Pedro. Nuestro hermano el Padre Juan Carlos y el que habla, os hemos traído estos presentes de nuestro pueblo San Sebastián en España. Tenga usted además de estos obsequios, estas dos pinturas de nuestro Santo Patrono San Sebastián.
-Os pedimos permiso, vuestra excelencia, y si nos autoriza a colocar una de estas dos imágenes del Santo San Sebastián en la parroquia de este pueblo al que usted nos ha asignado y que la providencia nos socorra y permita la buena labor del fortalecimiento en nuestra amada fe católica, expresaba con fervor el hermano Juan Carlos.
-Sí, hijos y hermanos míos. Por favor tengan a bien llevar uno de estos hermosos retratos que si están de acuerdo procederé a bendecir estas bellas representaciones del Mártir San Sebastián, en la Misa de la seis de la tarde, en la que están por supuesto invitados a concelebrar conmigo. Aprovecharé la Santa Liturgia, para presentarles ante la sociedad de esta ciudad de Guadalajara, y se corran las amonestaciones de su encargo en toda la Arquidiócesis a mi cargo y así, se esparza la noticia de su arribo, antes de vuestra llegada a Real de Asientos, en las próximas semanas y el pueblo esté preparado para recibirles como ustedes lo merecen.
-Os sentimos honrados, vuestra excelencia y así el hermano Jesuita Pedro, besaba la mano del Obispo en señal de obediencia y gracia.
-Pasemos a comer hermanos, que la Señora Lina, que es nuestra cocinera, les preparó un banquete con platillos típicos de esta región, aguas frescas y habrán de probar nuestro tequila.
Hoy descansarán y ya mañana con el Padre Byrne, un sacerdote irlandés que llegó a México hace 30 años, y se encarga de los temas administrativos, verá la logística para su traslado a Real de Asientos, pero eso lo vemos mañana. Venga, vamos a los sagrados alimentos.
- ¿Padre, nos puede acompañar un seminarista cuya ordenación no se concretó y estuvo fuera de la Nueva España en tierras orientales catorce años? Os pedimos vuestra Excelencia, nos de su reverencia y gracia, para que este buen hombre e hijo de Dios funja, como nuestro Diácono y ayudante general. Llegó con su mujer y un tío provenientes desde la lejana Siberia.
-Por supuesto Padre Pedro, ustedes ya se conocen y confían en él, cuenten con mi aprobación. Es más, digan a este futuro Diácono que será un gusto que nos acompañe en la mesa. Será muy interesante saber de sus travesías por el lejano oriente.
-Voy a avisarle a Juan Manuel, exclamaba animoso y contento el Padre Juan Carlos.
Los jesuitas que regresaron a México en 1819, se esforzaron en reactualizar su tradición e ideario y pronto dejaron sentir nuevamente su capacidad para trabajar, organizar y educar en favor de cientos de personas, poblados y comunidades.
A Juan Manuel, el Diácono, desde niño le llamaron la atención, las historias que le platicaba su abuelo sobre los Tlaxcaltecas que habían ido en la Nao de China a pelear contra los japoneses en las Filipinas y que habían derrotado a los mismísimos Samuráis, quienes quedaron sorprendidos de las capacidades de los guerreros Tlaxcaltecas. Su Tata, como él le decía, le enseñó el manejo del machete y la espada, pues tenía un hermoso florete español muy antiguo que había adquirido de un mercante chino hacía algunas décadas.
Don Jeremías, el abuelo, era un comerciante muy apreciado en el puerto, aficionado a los gallos y corridas de toros, apostador, además de enamorado y asiduo visitante a diversas casas de citas en el puerto, pero había una casa, “la casa de Paty”, donde tenía sus tres lindas novias de planta. Las lindas jóvenes Laurita, Allienita y Amparito, tres chamacas bronceaditas piel canela, hermosísimas, que serían las encargadas de hacerle un gran favor al viejo Jeremías. Claro, esto a cambio de una muy generosa retribución a Doña Paty la matrona, y también a las chamacas.
Serían las encargadas durante toda una semana de encierro en “la casa de Paty”, de iniciar a la vida sexual al chamaco Juan Manuel, con sólo trece años de edad, días en que lo ilustraron en las artes del amor. La Abuela de Juan Manuel y esposa de Jeremías, Doña Mercedes, se hacía de la vista gorda, pero no dejaba de repelar, aunque en el fondo le daba gusto que su nieto se iniciara con “chamacas conocidas”, aun así, le daba con todo a su coscolino marido.
-Ya te harás más viejo, Jeremías jijo cabrón y ahí te daré tus tundas y chingas, ya verás. Decía la abuela Mechita, con gracia y buen humor. Doña Mercedes era muy apreciada y admirada en el puerto de Acapulco.
Don Jeremías, era excelente peleador enseñó a su nieto Juan Manuel a lidiar con marineros y comerciantes, porque las clases de box y las peleas eran materia obligatoria como de escuela, para todo niño que crece en un puerto si es que desea sobrevivir a esos bravos ambientes. Entre sus aprendizajes además de la escuela, estaban el box, el manejo de la espada y machete, aunado a las faenas propias de un comerciante en el puerto.
Don Jeremías, presumió durante tres días de borrachera y parrandas, la entrada a la edad adulta de varón y hombre de su nieto Juan Manuel.
Juan Manuel el justiciero de Suavos, franchutes y salvador de los compadres.
- ¡Juan Manuel, por aquí! Gritaba Toño que era atacado inmisericordemente por tres Suavos que estaban a segundos de terminar con su vida. Nuevamente con la agilidad y fuerza del jaguar, se lanzó sobre ellos, con su katana y florete, manejados con destreza, destripó a dos, al tiempo que el jakasio, el tío Jorge, con una larga vara de bambú confeccionada con filos de navaja en sus extremos, mandó a mejor vida al tercer francés, en cuestión de minutos.
Al término de la batalla, fueron rescatados por los Párrocos Pedro y Juan Carlos, acompañados por el Chamán Rafael, quien dio cuenta de otro francés con un buen tiro de su rifle. Los Jesuitas, además de ser estudiosos de la filosofía y la teología, tenían estudios en medicina. El nivel de preparación de los miembros de la Compañía de Jesús era de excelencia, y estos conocimientos les permitieron salvar la vida de los tres compadres.
Exclamaban maravillados los Jesuitas: ¡Juan Manuel, hijo nuestro, eres una bendición y un milagro también! Ustedes también mis valientes jakasio tío Jorge y chamán Rafael. ¡Que bárbaros! Dejen les demos abrazos y besos, que bien se los merecen. Así alababan a los valerosos miembros de su Parroquia, y no paraban de elevar plegarias y loas al cielo. Somos bendecidos y agradecidos por contar con tan valioso Diácono y su tío.
Hijos nuestros. ¿Cómo podemos pagarles el haber salvado la vida de los compadres? ¿Y también la nuestra? ¿Cómo podemos darles en lo material algo a cambio de lo mucho que nos han ayudado?
Juan Manuel, el Diácono, místico, y un personaje con múltiples virtudes, les respondió:
-El dinero como quiera se paga, los favores nunca. Además, ustedes hermanos son muy importantes en mi vida, trascendentes y que mejor manera de seguir iluminando mi vida, que contar con sus enseñanzas y la presencia de los tres compadres, tan importantes para ustedes padres Pedro y Juan Carlos, y lo que es importante para ustedes, lo es también para mí.
Juan Manuel y el tío Jorge, se adelantaron a una elevación para, desde ahí, asegurarse que los franceses y conservadores hubieran huido. Les enviamos una señal de humo cuando hayamos confirmado.
- ¿Padre Pedro, notó el cambio en la figura y expresiones de Juan Manuel?
-Sí, hermano Juan Carlos, lo he notado. Ha pasado en segundos, de ser un feroz jaguar a un vigilante y apacible pastor de chivas y borregos. Nuestro Diácono tiene la agilidad de un puma y rapidez de un halcón, había dado cuenta de más de diez enemigos, sin recibir rasguño alguno. Pero seamos prudentes, hermano Zamorano. Usted y yo sabemos que en estas tierras hay fenómenos humanos, espirituales y muchos de estos, no los podemos explicar y en estos casos, es mejor agradecer y encomendarnos a la Virgen de Guadalupe Tonantzin.
-Sí, padre Pedro, así habremos de actuar. Pero sí escribiré sobre este día que nos dejado marcados para la eternidad.
-Bueno, hermano Zamorano, carguemos a los compadres y llevémoslos, porque están heridos de gravedad. Y si usted no ve lo contrario, yo veo señales de humo en aquella elevación.
Recogieron a los muy mal heridos compadres. En una carreta que adaptaron lo mejor posible los llevaron al dispensario, donde con sus conocimientos, el apoyo de algunas monjas y el soporte del Chamán Rafael, lograron salvarlos.
De la Parroquia y el Convento, no nos quisieron decir a ni las esposas ni a los hijos de los compadres, que habían rescatado a los tres valientes soldados. Sabían que no podríamos controlarnos de querer ir a verlos al Dispensario y a la casa parroquial, lo que hubiese comprometido seriamente su seguridad, pues el Chávez malvado, el gobernador espurio, y los franceses ardían en deseos de apresarlos y fusilarlos por la cantidad de bajas que les habían provocado en el campo de batalla. Chito, el capataz de mi papá, comentó que nunca soportaron que los gallos de mi padre y los de sus compadres, fueran más chingones que los galleros de más renombre en la región, esto era intolerable para sus adversarios que en su mayoría eran conservadores, ahora apoyados por los franchutes.
Llegaron en estado grave y tras las curaciones médicas, de las monjas Rafaela y Aurora y los sacerdotes Pedro y Juan Carlos, apoyados por el chamán Rafael y el tío Jorge Jakasio, también curandero, hicieron posible que, en sólo tres semanas, lograran salvar la vida. ¡Estaban fuera de peligro! Delicados, pero con la dicha de estar vivos.
Los Jesuitas decidieron tener a los compadres Manuel, Adrián y Antonio, no sólo en la Casa Parroquial, sino en sus propias habitaciones, dada la infame persecución que había iniciado el nuevo gobernador Juan Chávez, el gober malo, en contra de las familias, tanto del coronel Azuegonmass, como de los Regidores Venzor y García Luna Martínez. Los compadres, que ya hacía tiempo le habían hecho pasar momentos de gran molestia al cacique Juan Chávez, quien, al ser derrotado en esa escaramuza, atizó a todos sus funcionarios y fuerzas rurales, contra las esposas e hijos de los tres compadres. Y por si esto no fuera suficiente, y ante la real posibilidad de un asalto armado a la casona, las monjas Aurora, Rafaela y la mismísima Madre Superiora Brigditte Laudren, se fueron a vivir a la casona, a fin de proteger a las tres familias de los compadres y dar asistencia religiosa y educativa a los niños.
Las hermanas Sor Fallita Rafaela y Sor María Aurora Peckelin, asignadas a Real de Asientos, dependían de la Superiora, la Madre Brigditte Laudren, quien había arribado a Aguascalientes en 1823, tras haberse ordenado. Quiso venir a América para servir y hacer crecer la misión de la Orden de la Compañía de María Nuestra Señora, que había llegado a la todavía Nueva España, en 1807. La Superiora al saber que se trataba de los compadres Azuegonmass, García Luna Martínez y Venzor, a quienes ya conocía, se trasladó de inmediato para apoyar y verificar la situación de los valientes soldados, que, si bien eran jugadores empedernidos a las cartas y apostadores de gallos y aficionados a las artes taurinas, se sabía que eran nobles personas, buenos esposos, excelentes padres de familia y generosos con sus trabajadores. Por todo ello, se habían ganado el afecto de los hidrocálidos.
El gobernador Juan Chávez, el malo, era, curiosamente, muy religioso. Ante la amenaza que le impusieron los padres Pedro y Juan Carlos con enviar sendas misivas a la Santa Sede en el Vaticano y al Superior General de la Compañía de Jesús, también en Roma. Cartas en las que evidenciarían sus tropelías, además de atacar a una Orden de Religiosas, como lo eran las de la Orden de la Compañía de María Nuestra Señora, que nada más y nada menos era una Orden de Monjas, fundada en Burdeos Francia, por Santa Juana Lestonnac en 1607, lo cual, en ese momento, era una espada blandiendo sobre el ego y estupidez del Chávez malvado.
Los jesuitas Pedro y Juan Carlos, además, fueron a presentar una queja ante el General Aquiles Bazaine, quien no quería complicaciones de ningún tipo ante Napoleón III, y mucho menos aceptaría que unas monjas francesas fueran agredidas. La Madre Briggitte Laudren, hizo lo propio y tomó cartas en el asunto y en tono por demás enérgico se dirigió personalmente Bazaine, quien ante tantas torpezas del gobernador espurio Chávez malo, decide removerlo de su cargo y nombrar a Cayetano Basave, quien también duró poco en el cargo, pero al menos dejó de joder a mis padres y a las familias de los compadres. Los siguientes gobernadores de Maximiliano, Francisco R. de Esparza y Manuel Arteaga Guerrero, recibieron la orden de Bazaine, que no se metieran con las familias Azuegonmass, Venzor y García Luna Martínez.
Con el tiempo, la Madre Briggitte, hizo una curiosa sinergia con Marina, la esposa del Diácono Juan Manuel y el tío Jorge “el jakasio”. En su bautizo habían recibido también apellidos: Volkova para Marina y Volkov para el Tío. Los monjes ortodoxos sabiendo el gusto hacía los lobos por las culturas de Jakhasia decidieron darles el apellido Volkov que significa Lobo en ruso. Ambos se habían integrado felizmente a México, convirtiéndose en la mano derecha de la superiora, la monja Laudren, y del mismo Convento de la Orden de la Compañía de María Nuestra Señora.
El tío Jorge, “el Jakasio”, el chamán otomí Rafael y el mismo Juan Manuel, hicieron años después un largo viaje al norte de la Sierra Madre, para intercambiar conocimientos en chamanismo, sanación, herbolaria y manejo de energías con Wixárikas, Tepehuanos y Rarámuris, en las serranías y desiertos de Durango y Chihuahua.
Marina tuvo hijos y formó familia con Juan Manuel. El tío Jorge, “el Jakasio”, se regresó a la Sierra Madre donde hizo familia con una joven Tepehuana.
Xico Martínez, pelea en Tabasco contra los franceses y va a Yucatán y Chiapas.
Viví tiempos de gran angustia, las heridas de papá, si bien mejoraron sustancialmente, ya no podría volver a luchar y esto lo desmotivaba en su moral. Sus compadres, Adrián y Toño, también estaban en las mismas, pues habían quedado muy lastimados, cabizbajos, pero no derrotados. Lo bueno que, entre los tres guerreros, se daban ánimos. Todos nos habíamos adaptado en la casona como en una gran comuna, nadie les dejaba a los valientes soldados darse a la tristeza. Habíamos convenido que una vez que sacáramos a los franchutes, todo regresaría a la normalidad.
-Hija, quiero hablar contigo. Ven, vayamos a caminar, me dijo una tarde mi madre.
Has sido muy fuerte en no mostrar congoja ni queja alguna y, como tu madre que soy, sé que debes estar muriendo por dentro al no saber ni tener noticias de Xico, y en silencio dedicarte en cuerpo y alma a tu padre y a esta tu mamá que ya con algunos achaques, en fin. Quiero darte las gracias, Carmela, por tener tanta entereza, fortaleza y fe. Tengamos esperanzas que Xico esté bien.
Recuerdo que abracé a mi madre y lloré como nunca lo había hecho en mi vida.
Cuando regresamos a casa, nos esperaban unas tazas de chocolate bien caliente y panes con nata de leche de cabra y miel de abeja en abundancia.
-Hijita, tengo noticias, llegó esta carta hace una hora. Le dijo Manuel, su padre. Tienes noticias de Tabasco.
San Juan Bautista, Tabasco a 21 de marzo de 1864.
“Mi Carmelita, mi chaparrita ojos verdes de amor. Hace un mes, las armas nacionales se cubrieron de gloria, al derrotar a los franchutes de esta noble y leal ciudad de San Juan Bautista, los hicimos correr. ¡Ya probaron que con el pejelagarto (un pescado muy curioso de estas regiones) no se juega, je! Seguimos dando las batallas que sean necesarias, hasta sacar a los franceses de nuestra patria.
Tabasco es una tierra mágica mi amor, es como el paraíso, llena de ríos, selvas, aves hermosas, con animales que parecen salidos de cuentos o fábulas. El otro día vimos un enorme jaguar que devoraba a otro animal aún más grande, como una cruza entre marrano y elefante chiquito, le llaman Tapir, vaya que es feo.
Entre las aves, la que más me ha impresionado, es una que le dicen Águila Arpía, es del doble de tamaño que un Águila Real, en verdad es imponente y le encanta cazar monos y otros animales, hasta venados chiquillos se atreve a levantar. Los cocodrilos son grandes y algunos hasta gordos. Es un lugar hermoso. Su gente, cálida y alegre, como los jarochos.
Me han ordenado mis superiores, comande una Tropa para ir a Yucatán y apoyarles en la lucha por pacificar a los Mayas en su guerra, que hay que decirlo, en gran parte es justa. Tenemos de todo, pelea contra los conservadores, contra los franceses y ahora también contra los indios que, por los informes que he tenido, han sido muy maltratados por los caciques de la península, quienes les tienen en una situación terrible de esclavitud. Se nos ha ordenado ir y buscar ayuda entre los habitantes de esas regiones, para que los franceses tengan cada vez menos apoyo en nuestro país. Contra los conservas y los franchutes me voy con todo. En el tema de los Indios Mayas, buscaré hacer mediación, pues su situación, te repito, es insostenible, y merecen se les proteja y auxilie, contra los terratenientes que los han esclavizado.
Amor mío, no dejes de rezar por este soldado de la Patria, y cuando esto termine honraré mi promesa con la gran hoguera desde lo alto del Cofre de Perote, anunciando mi regreso a ti, mi hermosa abejita.
Te quiere y ama tu soldado Xico, siempre tuyo ayer, hoy y mañana, que no deja de pensar en mi princesita, mi abejita, tan llena de vida, de ilusiones y amor. Ya verás como a mi regreso haremos grande a México y nuestros hijos y nietos contarán nuestra historia.
No volví a recibir carta de Xico, mi soldado, mi amor, durante año y medio, hasta finales de 1865. Todo ese tiempo, sentía que moría de la pena y el dolor; empecé a vestir de luto, pues así, y por consejo de los párrocos, los Sacerdotes Ruíz y Villaseñor, mantendría alejado a los pretendientes que, ahora que escribo estas líneas, a mis 93 años, puedo decir que eran bastantes los que me cortejaban, y cómo no, si era yo una muñeca, je, pero esta abejita ya tenía su abejorro y no le sería infiel ni con el pensamiento. Así transcurrieron 1865, 1866 y ya en 1867 la suerte estaba echada en contra de Maximiliano, que, viéndolo fríamente, sus intenciones fueron buenas, pero pecó de ingenuo, sin tener el perfil para gobernar. Era un soñador, eso sí, coscolino y como ya dije, noviando y enamorando a cuanta chamaca se le pusiera enfrente. Algunas de sus reformas fueron buenas, pero liberales, lo que le colocó en una posición de debilidad frente a la Iglesia y a los conservadores, quienes esperaban que el austríaco les apoyara eliminando las reformas de 1857, pero esto no fue así y ahí empezó a cavar su tumba el buen Max.
Los Sacerdotes Ruíz y Villaseñor, me habían incluido en un animoso círculo de lectura, siendo este presidido por el maestro Federico Mügemburg, quien criticaba la invasión de los franceses, pero analizaba con objetividad las acciones de Maximiliano. El encuentro se dio porque escuché a los párrocos hablando que el profesor, Don Federico, había recibido una copia de una carta que el escritor Víctor Hugo le había enviado al emperador Napoleón III, donde le criticaba acremente por su invasión a México. Ahí nació la idea del encuentro, una vez cada dos semanas, para leer y reflexionar temas de historia y política. Ese círculo de reflexión, marcaría mi vida para siempre y me motivaría a algún día convertirme en maestra, lo que logré al ser Normalista en Xalapa, bajo la influencia de Rébsamen en 1890 y ser su pupila. Cómo les agradezco a los Párrocos Ruíz y Villaseñor, así como al maestro Mügemburg, sus enseñanzas y trascendencia en mi vida.
A todo esto, a 77 años de estos dos eventos: la guerra civil en Estados Unidos y la invasión francesa a nuestro país, México tuvo el beneficio, entre todas las tragedias, de evitar que los gringos siguieran anexándose más territorio.
Al iniciar la Guerra de Secesión en los EEUU, por los estados confederados, que vieron sus intereses vulnerados y buscaban la independencia, a fin de mantener la esclavitud y sus privilegios. Esto fue aprovechado por Napoleón III, quien deseaba un imperio latino, católico, romano, que hiciera frente a la expansión de la naciente potencia anglosajona. Sin embargo, el destino le tendría otras sorpresas al inquieto y belicoso gobernante francés.
Prusia estaba muy próxima a unificarse en Alemania, y los conflictos con Francia se acrecentaban exponencialmente. La rivalidad entre Bismarck y Napoleón III iba en aumento. Del otro lado del Atlántico, Abraham Lincoln triunfaba con sus yanquis y aseguraba que la unión de todos los Estados Unidos de América quedara sellada. Es así que México, coyunturalmente, puede conservar la integridad de su territorio nacional y ahora sí, desde 1867, verse a sí mismo como un Estado Nacional Republicano que contaría, como en un pacto no escrito, que EEUU no se apropiaría de más territorio.
Aunque debo decir que en este 1939, el peligro aún es latente y debemos inculcar y reforzar los valores, civismo, conocimiento de nuestra historia y geografía en nuestros niños y jóvenes y también en los adultos, a fin de fortalecer la identidad como mexicanos, pues vendrán duras pruebas, pero confío que nuestra cultura nos saque avante.
1865, nuevamente recibe carta.
A finales de 1865, un fresco y muy airoso día miércoles primero de noviembre, recibí otra misiva de mi Xico. Yo oraba y rezaba a diario porque estuviera vivo y si en caso de que hubiera muerto, y si estaba tres metros bajo tierra, al menos me hicieran saber dónde estaban sus restos, para traerlo junto a mí y darle cristiana sepultura. Pero no, esa carta de noviembre del año 65 me hizo saltar de alegría. Resulta que de Yucatán lo enviaron a la costa de Chiapas, en el Soconusco y a coadyuvar en el traslado de los poderes del Estado de San Cristóbal de las Casas a Tuxtla.
“Mi Carmelita, estoy vivo y las señales que nuestra lucha mantiene viva a nuestra patria liberal, siguen llegando. Te escribo un poco de lo mucho que me ha acontecido desde mi última carta el año pasado.
Te pido perdón y disculpa, pero sé que sabrás comprender que, si una carta es interceptada, esta puede generar peligro para tu familia. Y aún más, complicar nuestro compromiso matrimonial. Pero ten la seguridad que pienso en ti, en nosotros, cada minuto, en cada respiración vienes a mi mente, siento tus besos, tu aliento, tus abrazos, escucho tu voz angelical y veo tus ojos mirándome, llenos de amor y comprensión. Mi abejita, cada que le pongo miel al café, pienso en ti.
Xico envió un par de cartas más que iban dirigidas a otras personas, que variaban, para no despertar sospechas, y mis leales amistades en Perote, me las entregaban. Afortunadamente, nunca carta alguna fue interceptada, pues también Xico, les pedía a sus conocidos que las enviaran desde distintos puntos de Chiapas.
En Chiapas hubo complejas batallas entre los conservadores del bando de Juan Ortega, que tenía el apoyo del presidente de Guatemala, Carrera. Ortega, rechazó la Constitución de 1857. Nicolás Ruíz, liberal, se opuso a Ortega. Y fue en Tabasco, donde tuve contacto con un liberal llamado Casimiro Castañón, también opositor a Juan Ortega, que había sido desterrado a Tabasco. Ahí lo contacté y me pidió que les ayudara a reestablecer la institucionalidad en el territorio chiapaneco. Después de convivir con Casimiro, sentí que Ortega le tenía envidia por su destacado haber como capitán de la guardia nacional.
En la región del Soconusco, cerca de la frontera con Guatemala, subí el volcán Tacaná y estando en esas tierras, que son en verdad hermosas, conocí a unas familias alemanas que había llegado para dedicarse a la siembra del café. No me lo vas a creer mi abejita hermosa, pero ya aprendí a cultivar, cortar, tostar y preparar café. Cuando regrese pondremos nuestro propio beneficio y recuerda que después que veas las señales en el coloso de Perote, con la hoguera prometida y los fuegos pirotécnicos en tu honor, te llevaré a Xico, mi tierra, para estar juntos a la eternidad.
Y sí, así fue. Lo cumpliste mi Xico amado, mi Subteniente de amor. Me trajiste a tu pueblo que, vigilado eternamente por el Pico de Orizaba y el Cofre de Perote, entre niebla, colores, olor a bosque de pino, trópico y café, me envuelve en cada amanecer entre la niebla y mi taza de café con tequila. Mi Subteniente, al final, me diste los mejores años de mi vida…
Es tiempo. Ya es hora de volver a verte y alcanzarte en esa hoguera de fuego en lo alto de nuestro eterno vigilante y amado Cofre de Perote, pídele al dragón de San Jorge que venga por mí, espérame tantito, ya no me he de tardar…
Mi Xico, gracias porque me diste el universo en una taza de café…
Carta de sus hijos y nietos al pueblo de Xico.
Beatriz, la hija de Carmelita, leía esta carta:
“Hoy viernes 12 de diciembre de 1941, que celebramos a nuestra madre la Virgen de Guadalupe Tonanzin, y siendo las ocho de la noche, le informamos a la familia, amigos entrañables, vecinos y a la comunidad de Xico, con profundo pesar:
Que nuestra madre y abuelita Carmelita Azuegonmass de Martínez, ha fallecido en esta ciudad de Xico a los 95 años, siendo las seis de la tarde, acompañada de sus queridas Amalia y Marcelina, mientras escribía plácida, entre café y tequila, abrigada por su jorongo y envuelta en sus sueños que ahora trascenderán al tiempo, bordando la eternidad en mágicas letras…”
autor: Jorge Rafael Martínez Azuela.
AGRADECIMIENTOS.
A.Marcelino.Sánchez.Martínez.Propietario.de.CAFÉ.-KUKULKÁN.(Cel.y.WhatsApp.228-140-9095).https://www.facebook.com/profile.php?id=61554249813365&locale=es_LA Gracias, mi líder, por tú, amistad y empatía, así como tú apoyo incondicional a la construcción de este proyecto y el soporte logístico en Coatepec y Xico, así como en el corte de Café, siendo maestro ejemplar y paciente.
A Juan Hernández Corona el popular “Tío John”, dueño del restaurante “Hola”, en Xico Veracruz por su hospitalidad y empatía.
A Don Amado Manuel Izaguirre, historiador y cronista de Xico. Intelectual consumado cuyas relatorías sobre la historia de Xico, de Veracruz, México y el mundo, son una delicia al escuchar de tan gentil y distinguido erudito en sus piensos y disertaciones. Gracias, maestro Don Amado Manuel Izaguirre, por su tiempo y espacio.
A Claudia Fragoso Botello. Curadora, Guía y Socia del Museo de Historia y Casa de los Misterios. Xico Veracruz.
A Alfonso Tepetla y a sus señores padres. Café y Beneficio Cocuyos, por su apoyo en el Beneficio, así como en los cafetales.
A las hermanas Blanca Lorena y Mónica Roldán Loranca por sus observaciones y correcciones a este texto, siendo las mimas vitales en la construcción del mismo.
A Martha Ivonne Mendoza López por su apoyo en las correcciones y observaciones a este texto.
A la Biblioteca Pública Peroteños Ilustres del H. Ayuntamiento de Perote, por su apoyo y facilidades, en especial a: Maestra Gloria Gallardo Zapata directora de Educación, Arte y Cultura del H. Ayuntamiento de Perote, Veracruz, Alicia Monserrat Fuentes Carreón. Auxiliar Administrativa del Área de Educación y Geovani Olivares Peralta. Auxiliar Administrativo de la Dirección de Educación, Arte y Cultura.
A la Lic. Belén García directora de Turismo del H. Ayuntamiento de Real de Asientos Aguascalientes y Cronista de Real de Asientos, Aguascalientes y Rafael Posada. Jefe de Departamento en la Dirección de Turismo del H Ayuntamiento de Real de Asientos, Aguascalientes.
A Aline Subayra Arroyo Ponce y su esposo José Antonio Carvajal Cantillo por su apoyo y soporte logístico en la construcción de este proyecto, así como su amistad y empatía hacia este proyecto.
A Pedro Joaquín Coldwell y a Juan Carlos Zamorano Unanue Malvado. Mis muy queridos empáticos, trascendentes, afectos hermanos y amigos. Gracias Totales por aceptar ser incluidos como personajes en el presente escrito.
A Juan Manuel Domínguez por tu apoyo logístico en la construcción de este proyecto, así como tu amistad, solidaridad y empatía. Gracias Totales por aceptar ser incluido como personaje en el presente escrito.
A Juan Hernández Corona John. Dueño del Restaurante HOLA en Xico Veracruz. Mi agradecimiento por su empatía cooperación en Xico que permitió la construcción de esta novela histórica corta. Gracias Totales por aceptar ser incluido como personaje en el presente escrito. https://www.facebook.com/profile.php?id=100063838041947&locale=es_LAWhatsApp 228 409 4286
A Doña Blanca Lorena Roldán Loranca por su tan afecta amistad y confidencias. Gracias Totales por aceptar ser incluida como personaje en el presente escrito. https://www.facebook.com/restaurantesyanya?locale=es_LA
A Juan flores Enríquez. Ex presidente Municipal de Casas Grandes Chihuahua, Normalista y Maestro Emérito, siendo Docente comprometido con la educación. Gracias por tú apoyo y soporte en la construcción de este proyecto, así como su amistad y empatía. Gracias Totales por aceptar ser incluido como personaje en el presente escrito.
A Raúl Pantoja Baranda. Férreo defensor de los Derechos Humanos. Gracias por tu apoyo afecta amistad, correcciones y soporte en la construcción de este proyecto. Gracias Totales por aceptar ser incluido como personaje en el presente escrito.
A mi querido primo y afecto hermano Pedro Antonio García Luna Martínez. Gracias Totales por aceptar ser incluido como personaje en el presente escrito.
A mi querido súper vecino, solidario y empático amigazo Don Oscar Adrián Venzor Vargas. Gracias Totales por aceptar ser incluido como personajes en el presente escrito.
A Gerardo Jorge Aguilar Jácome. Gracias afecto y solidario amigo. Funcionario ejemplar que trabaja por el desarrollo sostenible y el manejo de los residuos desde la normatividad mexicana. Gracias Totales por aceptar ser incluido como personaje en el presente escrito.
Al arqueólogo Leonel Ernesto Mendoza Hernández por su apoyo en la maquetación y revisión final de este escrito.
A.Rosalina.Domínguez.Ramírez.Directora.de.“Ross.el.arte.de.escribir.bien".ross.ortografía@gmail.com(Cel.y.WhatsApp.33-1772-7672). https://www.facebook.com/CursosRossOficial/?locale=es_LA
REFERENCIAS y CONSULTAS
https://paratodomexico.com/historia-de-mexico/conquista-de-mexico/la-ruta-de-cortes.html“Xalapa, Xico, Ixhuacan y Texutla. Cortés partió de Zempoala el 16 de agosto de 1519 con 400 soldados, 16 jinetes, 6 piezas de artillería y 1300 totonacas. Las tropas se dirigieron con dirección al Oeste llegando a Xalapa. De allí salieron con dirección Suroeste bordeando las faldas meridionales del Cofre de Perote pasando por Xicochimalco, Ixhuacan y Texutla (hoy desaparecida).”
https://www.infobae.com/america/mexico/2022/06/15/hernan-cortes-cuales-fueron-las-ciudades-por-las-que-paso-el-conquistador-antes-de-llegar-a-tenochtitlan/#:~:text=Sin%20embargo%2C%20antes%20de%20que,como%20Xalapa%2C%20Coatepec%20y%20Xicochimalco“De ahí, a Coatepec, para después pasar por Xicochimalco. Pasaron por Ixhuacán, en donde sufrieron un intenso frío y la agresividad del suelo volcánico, para luego llegar a Malpaís, área que circunda la montaña de Perote, para luego pasar por Xalapazco y Tepeyahualco.”
https://www.fuimospeces.mx/single-post/2018/04/29/xicochimalco “De acuerdo con el orden relatado, después de cuatro jornadas desde Zempoala, cuatro días de camino (Nebrija, 1495), llegaron a un lugar que denominó Sienchimalen el 19 de agosto de 1519, a consideración que el recorrido inició un 16 de agosto (Hernán Cortés, 2010: 38). Una deformación que identificamos certeramente con el topónimo de Xicochimalco, luego de revisar las glosas inscritas en el Manuscrito Madrid, autógrafo de la Segunda carta de relación (Menéndez-Pidal, 1947: 214) donde las palabras Sienchimalen se observan corregidas por las letras de Sicuchimalqu.”
https://www.google.com/search?q=primera+ruta+de+hernan+cortes+de+veracruz+a+tenochtitlan&rlz=1C1SLLM_enMX1137MX1143&oq=primera+ruta+de+hernan+cortes+de+veracruz+a+tenochtitlan&gs_lcrp=EgZjaHJvbWUyBggAEEUYOTIHCAEQIRigATIHCAIQIRigAdIBCjMwMzMwajBqMTWoAgCwAgA&sourceid=chrome&ie=UTF-8. “La ruta de Hernán Cortés para llegar a Tenochtitlan fue desde la costa de Veracruz hacia el Altiplano central mexicano. Ruta de Hernán Cortés. En febrero de 1519, Cortés salió de Cuba y llegó a Cozumel. Pasó por Cabo Catoche hasta llegar a Champotón, San Juan de Ulúa. En julio de 1519, fundó la Villa Rica de la Vera Cruz. El 16 de agosto de 1519, partió de Villa Rica de la Vera Cruz hacia Tenochtitlan. Pasó por ciudades como Xalapa, Coatepec y Xicochimalco. El 8 de noviembre de 1519, se encontró con Moctezuma Xocoyotzin en la calzada que daba entrada a Tenochtitlan. Aunque se le atribuye a Cortés haber abierto esta ruta, investigaciones recientes revelan que los castellanos utilizaron un antiguo camino comercial.”
https://www.rae.es/sites/default/files/Aparato_de_variantes_Historia_verdadera_de_la_conquista_de_la_Nueva_Espana.pdf“CAPÍTULO LXI3031Cómo ordenamos de ir a la cibdad de México, y por consejo del cacique fuimos por Tascala, y de lo que nos acaesció, ansí de rencuentros de guerra3032 como otras cosas que nos avinieron3033 Después de bien considerada la partida para México, tomamos consejo sobre el camino que habíamos de llevar, y fue acordado por los principales de Cempoal que el mejor y más conviniente camino3034 era por la provincia de Tascala, porque eran sus amigos, y mortales enemigos de mexicanos. Y ya tenían aparejados cuarenta principales, y todos hombres de guerra, que fueron con nosotros y nos ayudaron mucho en aquella jornada,y más: nos dieron docientos tamemes para llevar el artillería, que para nosotros, los pobres3035 soldados, no habíamos menester ninguno, porque en aquel tiempo no teníamos qué llevar. Porque nuestras armas, ansí lanzas como escopetas y ballestas y rodelas y todo otro género dellas, con ellas dormíamos e caminábamos, y calzados nuestros alpargates, que era nuestro calzado;3036 y como he dicho, siempre muy apercebidos para pelear. Y partimos de Cempoal demediado el mes de agosto de mil e quinientos y diez y nueve años, y siempre con muy buena orden, y los corredores del campo y ciertos soldados muy sueltos delante.
Y la primer jornada fuemos3037 a un pueblo que se dice Jalapa, y desde allí a Socochima, y estaba bien3038 fuerte y mala entrada, y en él había muchas parras de uva de la tierra. Y en estos pueblos se les dijo, con doña Marina y Jerónimo de Aguilar,nuestras lenguas, todas las cosas tocantes a nuestra santa fe y cómo eramos vasallos del emperador don Carlos, e que nos envió para quitar que no haya más sacrificios de hombres, ni se robasen unos a otros, y se les declaró muchas cosas que se convenían3039 decir. Y como eran amigos de los de3040 Cempoal y no tributaban a Montezuma, hallábamos en ellos buena3041 voluntad, y nos daban de comer. Y se puso en cada pueblo una cruz y se les declaró lo que significaba, e que la tuviesen en mucha reverencia. Y desde Socochima pasamos unas altas sierras3042 y puerto, y llegamos a otro pueblo que se dice Texutla; e también hallamos en ellos buena voluntad, porque tampoco daban tributo a México,3043 como los demás. Y desde aquel pueblo acabamos de subir todas las sierras, y entramos en el despoblado, donde hacía muy gran3044 frío y granizó y llovió; aquella noche tuvimos3045 falta de comida. Y venía un viento de la sierra nevada, que estaba a un3046 lado, que nos hacía temblar de frío. Porque como habíamos venido de la isla de Cuba3047 e de la Villa Rica, y toda aquella costa es muy calurosa, y entramos en tierra fría3048 y no teníamos con qué nos abrigar, sino con nuestras armas, sentíamos las heladas, como éramos acostumbrados a diferente templo.3049 Y desde allí pasamos3050 a otro puerto, donde hallamos unas caserías y grandes adoratorios de ídolos, que ya he dicho que se dicen cúes, y tenían grandes remeros de leña para el servicio de los ídolos que estaban en aquellos adoratorios. Y tampoco tuvimos qué comer, y hacía recio frío. Y desde allí entramos en tierra de un pueblo que se dice Zocotlán, y enviamos dos indios de Cempoal a decille al cacique3051 cómo íbamos, que tuviesen por bien nuestra llegada a sus casas; y era sujeto de3052 México. 3031 LXI G : LX <\61> A,3032 <\de guerra>,3033 cosas <\que nos avinieron\> G : cosas M,3034 conviniente camino G : conveniente M,3035 </pobres>,3036 <\que era nuestro calzado>,3037 fue<+mos>,3038 bien G : muy M,3039 convenían G : les convenía M,3040 de los de G : de M,3041 buena G : muy buena M,3042 <-tierras> <\sierras>,3043 tributo a México G : tributo M,044 gran<-dísimo>,3045 y llovió; aquella noche <-donde> tuvimos G : aquella noche, donde M,3046 <-nevada> <\a un>,3047</Cuba>”.
https://www.youtube.com/watch?app=desktop&v=r42xFenPr4Q&t=2897s Historia verdadera de la conquista de la Nueva España by Bernal Díaz del CASTILLO Part 1/6 (Audio Libro Historia verdadera de la conquista de la Nueva España by Bernal Díaz del CASTILLO Part 1/6) { A las 6 horas, 38 minutos, 04 segundos se inicia el } “Capítulo CAPÍTULO LXI Cómo ordenamos de ir a la cibdad de México, y por consejo del cacique fuimos por Tascala, y de lo que nos acaesció, ansí de rencuentros de guerra como otras cosas..”
https://www.google.com/search?q=xico+nombre+oroginal&rlz=1C1SLLM_enMX1137MX1143&oq=xico+nombre+oroginal&gs_lcrp=EgZjaHJvbWUyBggAEEUYOTIJCAEQIRgKGKABMgkIAhAhGAoYoAEyCQgDECEYChigAdIBCTc2ODlqMGoxNagCCLACAfEFQHgi3g0-yNM&sourceid=chrome&ie=UTF-8 El nombre original de Xico, Veracruz, es Xico-chimal-co, una palabra náhuatl que significa "en el escudo de las abejas". Xico es un pueblo prehispánico fundado en el siglo XIV por los totonacas. Se encuentra en las faldas del Cofre de Perote, rodeado de vegetación y tierra fértil. Xico es reconocido por su gastronomía, que incluye mole, tamales canarios, y el verde, una bebida tradicional preparada con hierbas silvestres en aguardiente.En 2011, Xico fue declarado Pueblo Mágico.
https://es.wikipedia.org/wiki/Mariano_Paredes_y_Arrillaga José Mariano Epifanio Paredes y Arrillaga (Ciudad de México, 7 de enero de 1797-Ciudad de México, 7 de septiembre de 1849) fue un político y militar conservador mexicano que, tras dar un golpe de Estado en 1845, detentó de manera interina el cargo de presidente de México en 1846. Estuvo al frente del país al principio de la intervención estadounidense en México. Por su recio carácter y severa disciplina, fue considerado como uno de los mayores jefes del ejército mexicano.1
https://www.travesiasdigital.com/destinos/alejandro-de-humboldt-en-mexico/ Guanajuato Humboldt no podía no ir a Guanajuato. La mina de la Valenciana se había convertido en la principal productora de plata en el siglo XVIII y su fama se extendía por toda Europa. El Barón visitó este sitio que, en ese momento, empleaba a más de 3 mil personas y tenía una profundidad de casi 200 metros.
https://es.wikipedia.org/wiki/Francisco_de_Paula_Mil%C3%A1nFrancisco de Paula Milán (1821–1883). Fue gobernador y comandante militar de Veracruz (1863). Al mando de un pequeño ejército, el 30 de abril de 1863 sorprendió y aniquiló a un pequeño grupo de la Legión Extranjera en la Batalla de Camarón.
https://es.wikipedia.org/wiki/AguascalientesEn 1835 , el presidente Antonio López de Santa Anna convirtió a Aguascalientes en capital de un nuevo territorio en represalia al estado de Zacatecas, convirtiéndose finalmente en capital de un nuevo estado en 1857.
https://es.wikipedia.org/wiki/Larrea_tridentataPlanta de Governadora o Guamis
file:///C:/Users/Jorge%20Rafael/Downloads/holivera,+Gestor_a+de+la+revista,+Ulua+27+articulo+5-strobel-hector.pdfOcupación y gobierno: el ejército francés en Xalapa, 1862-1863. HÉCTOR MANUEL STROBEL DEL MORAL*
https://es.wikipedia.org/wiki/Anexo:Gobernantes_de_Veracruz Anexo:Gobernantes de Veracruz.
https://es.wikipedia.org/wiki/Fernando_de_Jes%C3%BAs_Corona_y_ArpideFernando de Jesús Corona y Arpide. Gobernador sustituto de Veracruz en diversos períodos (1861, 1868-1869, 1870) sustituyendo a Manuel Gutiérrez Zamora y a Francisco Hernández y Hernández. Se negó a colaborar con los franceses y el imperio.
https://www.cuandoenelmundo.com/calendario/mexico/1861Viernes 19 de abril de 1861.
https://www.cuandoenelmundo.com/calendario/mexico/1862Calendario 1862. 23 de abril fue miércoles y el día 24 de abril jueves.
https://es.wikipedia.org/wiki/Paste#:~:text=El%20paste%20(del%20c%C3%B3rnico%20pasti,Soto%20y%20Mineral%20del%20MonteEl paste (del córnico pasti, y en inglés, pasty) es un alimento tradicional de la Comarca Minera en estado de Hidalgo, México. Su origen se remonta a los mineros de Cornualles, Inglaterra que laboraron en las minas de la región en el siglo XIX, quienes introdujeron el cornish pasty (paste córnico) a la región, pero este pasó un proceso de adaptación y modificación, de donde surgió el paste.1 Es considerado el platillo típico de Pachuca de Soto y Mineral del Monte.
https://es-mx.topographic-map.com/map-bm7cz/Reserva-de-la-Bi%C3%B3sfera-Sierra-Gorda/?center=20.34463%2C-99.81903Mapa topográfico Reserva de la Biósfera Sierra Gorda.
https://www.sct.gob.mx/fileadmin/DireccionesGrales/DGP/Atlas /Mapas 2023 /MAPA_NACIONAL_2023.pdf MAPA_NACIONAL_2023.pdf
https://www.milenio.com/cultura/huichapan-el-pueblo-magico-de-historia-y-culturaHuichapan: en El Chapitel se celebró por primera vez el Grito de Independencia La madrugada del 16 de septiembre de 1812, en el edificio conocido como el Chapitel, el General Ignacio López Rayón, Andrés Quintana Roo y el huichapense José María “Chito” Villagrán, celebraron por primera vez en el país el Grito de Independencia.
https://www.pinterest.com/pin/793689134353075108/visual-search/?x=16&y=16.948051948051955&w=532&h=387&cropSource=6&surfaceType=flashlight.ATZIN..nombre Nahuatl para mujer. “Nobleza o Nobles Pensamientos”.
https://es.wikipedia.org/wiki/Camar%C3%B3n_de_TejedaCamaron de Tejeda, localidad y ahora Municipio del Estado de Veracruz, donde fueron derrotados los franceses en 1863.
https://es.wikipedia.org/wiki/Batalla_de_Camar%C3%B3n#:~:text=La%20batalla%20de%20Camar%C3%B3n%20(Bataille,de%20Camar%C3%B3n%20de%20Tejeda%2C%20Veracruz.&text=Camar%C3%B3n%20de%20Tejeda%2C%20Veracruz%2C%20M%C3%A9xico La batalla de Camarón (Bataille de Camerone en francés) fue un conflicto que tuvo lugar el 30 de abril de 1863 entre la Legión Extranjera Francesa y el Ejército Mexicano cerca de la localidad de Camarón de Tejeda, Veracruz. La división de Bazaine salió hacia Perote al amanecer del 16 de diciembre de 1862. El 17 a medio día, tras recorrer un camino lluvioso y frío, llegó a La Joya, donde la tropa descansó. Cuando emprendió nuevamente su camino, la vanguardia fue sorprendida por una emboscada en la garganta de la salida de La Joya por una fuerza de guerrilleros mandados por 45 AHMX, Libro de acu el general Aurelio Rivera, que, favorecidos por la niebla, se encontraban ocultos en el bosque. A pesar de ello, las fuerzas francesas lograron repelerlos y dispersarlos.46 Una vez que la columna francesa llegó a Las Vigas, la brigada del general Márquez se le incorporó. El 18, avanzando rumbo a Cruz Blanca, fueron víctimas de otro duro ataque guerrillero por parte del general Rivera que se prolongó por tres horas. El 19 de diciembre de 1862 llegaron a Perote, cuya fortaleza había sido abandonada desde el 7 de noviembre por órdenes del general Ignacio de la Llave luego de que se intentó volar inútilmente uno de sus baluartes. De dicho punto los franceses partieron a Puebla el 7 de enero de 1863, para reunirse allí, como quedó acordado, con las fuerzas del mariscal Forey, que de igual forma habían salido de Orizaba en el mes de diciembre.
https://www.google.com/search?q=zuavos+en+m%C3%A9xico&sca_esv=b3c4d9ee3d75849a&rlz=1C1SLLM_enMX1137MX1143&sxsrf=AHTn8zo0jungyOzIPE5JSFKKvPKDuES9Og%3A1740641114329&ei=WhPAZ83xE7qhwN4PxOyroAg&oq=suavo&gs_lp=Egxnd3Mtd2l6LXNlcnAiBXN1YXZvKgIIAjIKEAAYsAMY1gQYRzIKEAAYsAMY1gQYRzIKEAAYsAMY1gQYRzIKEAAYsAMY1gQYRzIKEAAYsAMY1gQYRzIKEAAYsAMY1gQYRzIKEAAYsAMY1gQYRzIKEAAYsAMY1gQYRzINEAAYgAQYsAMYQxiKBTIPEAAYgAQYsAMYQxiKBRgKMg0QABiABBiwAxhDGIoFMg0QABiABBiwAxhDGIoFMg4QABiwAxjkAhjWBNgBATIOEAAYsAMY5AIY1gTYAQEyDhAAGLADGOQCGNYE2AEBMhMQLhiABBiwAxhDGMgDGIoF2AEBMhMQLhiABBiwAxhDGMgDGIoF2AEBMhMQLhiABBiwAxhDGMgDGIoF2AEBMhMQLhiABBiwAxhDGMgDGIoF2AEBSIctUABYAHABeAGQAQCYAQCgAQCqAQC4AQHIAQCYAgGgAh6YAwCIBgGQBhO6BgYIARABGAmSBwExoAcA&sclient=gws-wiz-serpLos zuavos fueron un cuerpo de infantería del ejército francés que invadió México y que participaron en la Batalla de Puebla. Características de los zuavos. Vestían chaquetín azul, pantalones rojos bombachos, botas, turbantes y talines blancos. Cargaban municiones o víveres en cajas de madera con el escudo francés. Tocaban clarines y tambores. Eran considerados un cuerpo de élite. Historia de los zuavos. El nombre zuavo proviene de la palabra bereber zwāwī, que es el gentilicio de la tribu zwāwa. Se originaron en Argelia y sirvieron en la mayoría de las campañas militares del ejército francés entre 1830 y 1962.
https://es.wikipedia.org/wiki/Se%C3%B1or%C3%ADo_de_Tlaxcala_(Huey_Altepetl_Tlaxcall%C4%81n)El Señorío de Tlaxcala (del náhuatl: Tollan Tlaxkallan), actual ciudad de Tlaxcala, fue fundada por los teochichimecas que –según la Historia Tolteca-Chichimeca– tienen su origen en los texcalteca1 que fueron parte de las siete tribus nahuatlacas que salieron del mítico Chicomóztoc, estaba conformado por cuatro barrios: Tepeticpac, Ocotelulco, Tizatlan y Quiahuixtlan.
https://www.google.com/search?gs_ssp=eJzj4tVP1zc0TDYtLLY0rTA0YPQSLkktSC3JTC5ITFYoyUmsSE7MSQQAyqoL7A&q=tepeticpac+tlaxcala&rlz=1C1SLLM_enMX1137MX1143&oq=&gs_lcrp=EgZjaHJvbWUqCQgCEC4YJxjqAjIJCAAQIxgnGOoCMgkIARAjGCcY6gIyCQgCEC4YJxjqAjIJCAMQIxgnGOoCMgkIBBAjGCcY6gIyCQgFECMYJxjqAjIJCAYQIxgnGOoCMgkIBxAjGCcY6gLSAQkzMzE1ajBqMTWoAgiwAgHxBV7HX7E9Jnua&sourceid=chrome&ie=UTF-8 Tepeticpac fue una ciudad precolombina que formó parte de la confederación de Tlaxcala. Fue la primera de las principales ciudades tlaxcaltecas en fundarse. El nombre de Tepeticpac hace alusión a la región geográfica del lugar ya que significa “en la cima del cerro”
https://www.cuandoenelmundo.com/calendario/mexico/1889sábado 14 de septiembre de 1889
https://tecnologias-educativas.te.gob.mx/calendar/view.php?view=month&course=1&cal_d=1&cal_m=4&cal_y=1864sábado 23 de abril del año 1864.
https://tecnologias-educativas.te.gob.mx/calendar/view.php?view=month&course=1&cal_d=1&cal_m=10&cal_y=1869martes 26 de octubre de 1869.
https://www.youtube.com/watch?v=UPU0AbWYzysAgustin Lara - Piensa en mí.
https://www.youtube.com/watch?v=QCIByZwmH7sAgustin Lara – Danzones De Agustín Lara.
https://www.juntadegobierno.unam.mx/integrante/alfonso-caso-y-andrade Antonio Caso. En 1919, recibió el título de abogado por la Escuela Nacional de Jurisprudencia. En 1920, obtuvo el grado de Maestro en filosofía. En 1925, se recibió de arqueólogo en la Escuela de Altos Estudios. Fue profesor en la Escuela Nacional de Altos Estudios de 1918 a 1933; cofundador de la Escuela Nacional de Antropología, y Director de la Escuela Nacional Preparatoria de 1928 a 1930. Del 15 de agosto de 1944 al 24 de marzo de 1945, fue electo Rector de la Universidad Nacional Autónoma de México. Durante su gestión convocó a los miembros del Consejo Constituyente Universitario para discutir el proyecto de Ley Orgánica que rige actualmente a esta Universidad y que fue elaborado por una comisión presidida por el doctor Antonio Carrillo Flores y aprobado por el Congreso de la Unión en diciembre de 1944.
https://es.wikipedia.org/wiki/Ant%C3%B3n_Mak%C3%A1renko Antón Makárenko. Pedagogo y escritor ruso soviético. El Poema pedagógico (Педагогическая поэма), que no es sino una historia de la colonia Gorki. Fue un libro popular en la URSS, compuesto originalmente por tres volúmenes, y actualmente forma parte del temario de estudio de numerosos planes universitarios relacionados con el mundo de la escuela y la pedagogía. ¿Qué defiende el colectivismo? Una cultura individualista está caracterizada por promover la independencia y la autonomía; por otro lado, una cultura colectivista promueve la interdependencia entre personas y su grupo, en estas culturas las necesidades del grupo se consideran más importantes que las del individuo.
https://es.wikipedia.org/wiki/Universidad_Aut%C3%B3noma_Agraria_Antonio_Narro La Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro (UAAAN) es una institución de educación superior de carácter público con sede en el municipio de Saltillo, en el estado de Coahuila, México. Fue fundada el 4 de marzo de 1923 en la localidad de la antigua Hacienda de Buenavista, en el municipio de Saltillo, Coahuila. La Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro es una de las universidades más importantes referente a la Agricultura en América Latina.1 Historia.Unidad Saltillo (sede). En el año 1912 Antonio Narro Rodríguez y su hermana Trinidad Narro Rodríguez donaron parte de sus fortunas y la Hacienda de Buenavista con el propósito de formar una escuela de agricultura. No obstante, debido a la revolución mexicana, fue hasta 1923 en que su albacea, Francisco Narro Acuña, pudo concretar la fundación de dicha escuela bajo el nombre de Escuela Regional de Agricultura Antonio Narro.1. En 1938 pasa a depender del gobierno del estado de Coahuila. Durante el período 1951-1953 queda a cargo del Instituto Tecnológico de Saltillo. En 1957 se incorpora a la Universidad Autónoma de Coahuila. En 1975 logra su plena autonomía y adquiere su actual nombre: Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro. En el año 2006 se le reconoce carácter nacional.1
https://www.youtube.com/watch?v=YY-u-lsyehU La fundación de la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro (UAAAN).
https://www.google.com/search?q=mariposa+en+purepecha&sca_esv=53a1189ee8f55c43&rlz=1C1SLLM_enMX1137MX1143&sxsrf=AHTn8zrk56ZdMkeepXpuexdLXQJotiPR-g%3A1740968938135&ei=6hPFZ6L_B5nawN4P0a6GmAM&ved=0ahUKEwiinP3Y7uyLAxUZLdAFHVGXATMQ4dUDCBA&oq=mariposa+en+purepecha&gs_lp=Egxnd3Mtd2l6LXNlcnAiFW1hcmlwb3NhIGVuIHB1cmVwZWNoYUgAUABYAHAAeAGQAQCYAQCgAQCqAQC4AQzIAQCYAgCgAgCYAwCSBwCgBwA&sclient=gws-wiz-serp Parákata significa mariposa en Idioma Purépecha.
https://es.wikipedia.org/wiki/P%C3%A1tzcuaro Pátzcuaro es una localidad del estado mexicano de Michoacán y cabecera del municipio homónimo. En la antigüedad era parte del señorío de los uacúsechas, la tierra de los purépechas. Pátzcuaro forma parte del programa turístico Pueblos Mágicos.
https://es.wikipedia.org/wiki/Candela_(Coahuila) año de 1690 cuando el general Alonso de León, gobernador de la provincia de Coahuila, fundó la misión de San Bernardino de la Candela. Casi un siglo después, en 1774, el gobernador Jacobo Ogarte y Loyola ordenó a Joaquín Sánchez Navarro que repoblara la zona con cuarenta y cuatro familias españolas. El nuevo asentamiento localizado en las cercanías de San Bernardino recibió el nombre de San Carlos de la Candela
https://es.wikipedia.org/wiki/Escalaf%C3%B3n_militar_de_M%C3%A9xico#:~:text=Jefes%20*%20Coronel.%20*%20Teniente%20coronel.%20*%20MayorEscalafón militar de México. [ No se tiene información sobre el escalafón militar de México en 1860, pero sí se puede consultar información sobre el escalafón militar de las Fuerzas Armadas de México en la actualidad.]
https://es.wikipedia.org/wiki/Juan_de_la_Luz_Enr%C3%ADquezLara Juan de la Luz Enríquez Lara (Tlacotalpan, 16 de mayo de 1836 — Xalapa, 17 de marzo de 1892) fue un militar y político mexicano. Se desempeñó como gobernador de Veracruz desde 1884 y hasta el momento de su muerte en 1892. También tuvo una carrera militar, en la que alcanzó el grado de general de brigada; participó en diversos conflictos, como la Guerra de Reforma o la batalla de Puebla, dentro de la Segunda intervención francesa en México. Luego de su muerte, la ciudad de Xalapa fue nombrada en su honor.
https://es.wikipedia.org/wiki/Enrique_R%C3%A9bsamen Enrique Conrado Rébsamen Egloff (1857-1904) fue un educador mexicano nacido en Kreuzlingen, Suiza el 8 de febrero de 1857, y cuyas reformas educativas influyeron de manera decisiva en el sistema educativo actual de México.1. En 1886 el Gobernador Enríquez encargó a Rébsamen la creación de una escuela normal en Xalapa y una escuela experimental anexa, que comenzaron a funcionar al siguiente año con veinticinco estudiantes.
https://somehide.org/wp-content/uploads/2023/04/galvan-galindo-2014-completo.pdf En la página 66 en la presentación pdf y 118 del texto original versa: La Escuela Normal encargada de la formación de docentes, la cual fue creada por decreto en 1886 e inició sus labores en enero de 1887, bajo la dirección del pedagogo suizo Enrique C. Rébsamen. Cabría señalar que aún después de creada esa institución las autoridades continuaron por varios años expidiendo títulos de profesoras. (Soledad García Morales Historia de la educación en Veracruz LUZ ELENA GALVÁN LAFARGA, GERARDO ANTONIO GALINDO PELÁEZ- COORDINADORES Primera edición, 22 de julio de 2014, Secretaría de Educación del Estado de Veracruz, 2014)
https://www.calendarr.com/mexico/calendario-septiembre-1939 sábado 16 de septiembre de 1939.
https://es.wikipedia.org/wiki/L%C3%A1zaro_C%C3%A1rdenas Lázaro Cárdenas del Río (Jiquilpan, Michoacán; 21 de mayo de 1895-Ciudad de México, 19 de octubre de 1970) fue un militar y político mexicano que se desempeñó como presidente de México del 1 de diciembre de 1934 al 30 de noviembre de 1940.1
https://repositorio.unam.mx/contenidos/el-instituto-nacional-de-antropologia-e-historia-como-organo-de-la-administracion-publica-federal-125032?c=peJyeb&d=false&q=*:*&i=1&v=1&t=search_0&as=0 El Instituto Nacional de Antropología e Historia como órgano de la administración pública federal Martínez Azuela, Jorge Rafael. Facultad de Derecho, UNAM, Tesis y cosechado de Repositorio de la Dirección General de Bibliotecas y Servicios Digitales de Información. Cita Martínez Azuela, Jorge Rafael. (1995). "El Instituto Nacional de Antropología e Historia como órgano de la administración pública federal". (Tesis de Licenciatura). Universidad Nacional Autónoma de México, México. Recuperado de https://repositorio.unam.mx/contenidos/125032 Descripción del recurso Autor(es) Martinez Azuela, Jorge Rafael Colaborador(es). Galindo Becerra, Eduardo, asesor. Tipo. Tesis de licenciatura. Título: El Instituto Nacional de Antropología e Historia como órgano de la administración pública federal. Fecha. 1995. Tema. Administración pública. Idioma spa.
https://es.wikipedia.org/wiki/Compa%C3%B1%C3%ADa_de_Jes%C3%BAs 19 de mayo de 1816 Fernando VII restituyó a la Compañía.
https://www.google.com/search?q=invasion+francesa+en+aguascalientes&sca_esv=b533263dbee55d18&rlz=1C1SLLM_enMX1137MX1143&sxsrf=AHTn8zpSqWzF5HPQ8-SGMJB-BierYHl5Qw%3A1739964106823&ei=yr61Z9P5MdujkPIPluTu-A8&oq=invasion+francesa+en+aguasclientes&gs_lp=Egxnd3Mtd2l6LXNlcnAiImludmFzaW9uIGZyYW5jZXNhIGVuIGFndWFzY2xpZW50ZXMqAggAMgQQIRgKSJCZAlCBEViNugFwAXgBkAEAmAGWAaAB4wSqAQMxLjS4AQHIAQD4AQGYAgagAqwFwgIKEAAYsAMY1gQYR8ICBxAjGLACGCfCAggQABiABBiiBJgDAOIDBRIBMSBAiAYBkAYIkgcDMi40oAfDFA&sclient=gws-wiz-serp La ciudad de Aguascalientes fue ocupada por las guerrillas reaccionarias El Gallo y Sierra Fría en diciembre de 1863, durante la Segunda Intervención Francesa en México. Las guerrillas entregaron la capital a las fuerzas francesas, poniendo la ciudad bajo su autoridad. ¿Cómo se dio la ocupación? Las guerrillas El Gallo y Sierra Fría llevaron a cabo una estrategia de desgaste económico y político para que el gobierno estatal abandonara la ciudad sin resistir. Las guerrillas se articularon con gavillas reaccionarias y bandas de salteadores. Las bandas de asaltantes con intenciones políticas se convirtieron en organizaciones político-militares complejas, capaces de negociar y crear alianzas.
https://es.wikipedia.org/wiki/Segunda_intervenci%C3%B3n_francesa_en_M%C3%A9xicoLa Segunda intervención francesa en México o Segunda Guerra Franco-Mexicana (1861-1867) fue una invasión militar de la Segunda República Federal de México por parte del Segundo Imperio francés de Napoleón III, supuestamente para forzar el cobro de las deudas mexicanas junto con Gran Bretaña y España. Los conservadores mexicanos apoyaron la invasión, ya que habían sido derrotados por el gobierno liberal de Benito Juárez en una guerra civil de tres años.23
https://es.wikipedia.org/wiki/AnexoGobernantes_de_Aguascalientes Gobernantes de Aguascalientes.
https://www.gob.mx/siap/articulos/humboldt-el-cientifico-y-explorador-que-recorrio-nuestro-pais? idiom=es Alexander Von Humboldt.
https://es.wikipedia.org/wiki/Jos%C3%A9_Mar%C3%ADa_Ch%C3%A1vezAlonso José María Chávez Alonso (Encarnación de Díaz, Jalisco, 26 de febrero de 1812 - Hacienda de Malpaso, Zacatecas, 5 de abril de 1864) fue un impresor, político mexicano, gobernador constitucional del estado de Aguascalientes de 1862 a 1863. Ocupó el cargo de gobernador constitucional del 20 de octubre de 1862, pero en medio de la Intervención Francesa tuvo que evacuar la ciudad de Aguascalientes el 18 de octubre de 1863 que a los dos días fue ocupada por el Ejército Francés. Su carta a su esposa Néstora Pedroza antes de ser fusilado: "Yo muero por haber intentado defender la Independencia de mi patria; no creo haber cometido una falta”.
https://es.wikipedia.org/wiki/Juan_Ch%C3%A1vez Juan Chávez (Hacienda de Peñuelas, Aguascalientes, 4 de julio de 18311 - Camino de Arrona, 15 de febrero de 1869) fue un político mexicano del Estado de Aguascalientes. Era conocido por los sobrenombres de "Ídolo de las Beatas" (sobrenombre que le fuera dado por la prensa liberal de la época)2 o "Rojas de los Mochos," sobrenombres que fueron impuestos por la prensa de la época.
https://editorial.uaa.mx/docs/ve_religiosas_catolicas.pdfLa siguiente tabla2 muestra el año en que llegaron las congregaciones y el nombre del obispo en funciones.3.Tabla 1. Evolución histórica de la vida consagrada en la diócesis de Aguascalientes. Congregación Año Obispo Actividad.Orden de la Compañía de María Nuestra Señora 1807 Anterior a la diócesis Educación (colegios) página 49.
https://es.wikipedia.org/wiki/Compa%C3%B1%C3%ADa_de_Mar%C3%ADa_Nuestra_Se%C3%B1ora#:~:text=La%20Orden%20de%20la%20Compa%C3%B1%C3%ADa,educativo%20para%20la%20ni%C3%B1a%20emprendedoraLa Orden de la Compañía de María Nuestra Señora (Ordo Societatis Mariae Dominae Nostrae, ODN) fue fundada por Santa Juana Lestonnac en 1607, convirtiéndose en el primer instituto religioso de carácter educativo para la niña emprendedora.
https://es.wikipedia.org/wiki/Feria_Nacional_de_San_MarcosFeria Nacional de San Marcos en Aguascalientes.
https://www.google.com/search?q=BATALLA+EN+TABASCO+CONTRA+LOS+FRANCESES&rlz=1C1SLLM_enMX1137MX1143&oq=BATALLA+EN+TABASCO+CONTRA+LOS+FRANCESES&gs_lcrp=EgZjaHJvbWUyBggAEEUYOTIHCAEQIRigAdIBCjIxNzMzajBqMTWoAgiwAgHxBdtS9gyZfThJ8QXbUvYMmX04SQ&sourceid=chrome&ie=UTF-8La Batalla del Jahuactal fue un enfrentamiento entre el ejército liberal tabasqueño y las tropas francesas que tuvo lugar el Domingo 01 de noviembre de 1863 en el municipio de Cunduacán, Tabasco. Este hecho ocurrió durante la Segunda Intervención Francesa en México. Desarrollo de la batalla. El ejército liberal tabasqueño fue comandado por los coroneles Gregorio Méndez Magaña y Andrés Sánchez Magallanes. Las tropas francesas estaban al servicio del Segundo Imperio Mexicano y fueron comandadas por Eduardo González Arévalo, quien se autoproclamó gobernador de Tabasco. El ejército liberal tabasqueño ganó la batalla, lo que les permitió reorganizarse y continuar la lucha. Tras la victoria, las fuerzas republicanas avanzaron hacia la capital del estado. Consecuencias de la batalla La expulsión de las tropas francesas de Tabasco fue un hito en la historia del estado. Tabasco fue el único estado de la República Mexicana que logró expulsar a los franceses por sí mismo. La victoria en Tabasco fortaleció la resistencia nacional contra el Segundo Imperio.
https://es.wikipedia.org/wiki/Toma_de_San_Juan_BautistaLa toma de San Juan Bautista se desarrolló precisamente en la ciudad de San Juan Bautista, capital del estado de Tabasco, y fue la victoria obtenida por el ejército liberal tabasqueño sobre el ejército intervencionísta francés y que culminó con la expulsión de los invasores franceses de la capital del estado, y comprende las luchas que inician con el sitio de San Juan Bautista por parte de las fuerzas liberales tabasqueñas el 2 de diciembre de 1863 y culminan el 27 de febrero de 1864 con el asalto final a la "Casa Fuerte" o "El Principal", edificio en donde se habían atrincherado los invasores franceses.
https://www.google.com/search=maximilianod+e+hasburgo+llega+a+mexico&rlz=1C1SLLM_enMX1137MX1143&oq=maximilianod+e+hasburgo+llega+a+mexico&gs_lcrp=EgZjaHJvbWUyBggAEEUYOTIICAEQABgWGB4yCAgCEAAYFhgeMggIAxAAGBYYHjIICAQQABgWGB4yCAgFEAAYFhgeMggIBhAAGBYYHjIICAcQABgWGB7SAQoxMDQ3M2owajE1qAIIsAIB8QV5V94_KK9YaQ&sourceid=chrome&ie=UTF-8Maximiliano de Hasburgo y Carlota, llegan a México el 28 de mayo de 1864.
https://www.cuandoenelmundo.com/calendario/1865 Miércoles primero de noviembre de 1865.
https://www.scielo.org.mx/pdf/liminar/v3n1/2007-8900-liminar-3-01-149.pdfpágina 4 (152) SAN CRISTÓBAL DE LAS CASAS 1864-1872: RADIOGRAFÍA DE UNA CIUDAD EN CRISIS. Juan Miguel Blasco López. Casimiro Castañón destacó por ser defensor de la causa liberal en el desempeño de su cargo de capitán de la guardia nacional. En consecuencia, fue deportado a Tabasco junto con otros liberales por el gobierno orteguista.
https://es.wikipedia.org/wiki/San_JorgeSan Jorge (en griego, Γεώργιος Georgios; en siríaco clásico , ܓܝܘܪܓܝܣ Giwargis; en latín, Georgius) es el nombre de un soldado romano ejecutado en Nicomedia a causa de su fe cristiana, por lo que se lo venera como mártir. Se cree que vivió entre 275 o 280 y el 23 de abril de 303. Según la leyenda áurea, era «del linaje de los capadocios», por lo que a veces se le identifica erróneamente con el obispo arriano Jorge de Capadocia, puesto que ambos procedían de Capadocia.
https://www.cuandoenelmundo.com/calendario/1941/diciembre Viernes 12 diciembre de 1941.
https://www.istockphoto.com/es/foto/antiguas-l%C3%A1pidas-en-jakasia-rep%C3%BAblica-de-jakasia-siberia-rusia-gm653149124-118626351 Antiguas lápidas en Jakasia. República de Jakasia, Siberia, Rusia.
https://es.wikipedia.org/wiki/Jakasia La estela “Jurtuiaj tas”, es una piedra adorada por la población local que consiguió que fuera devuelta desde el museo etnográfico hasta una pequeña aldea. Las mujeres le hacen ofrendas para tener hijos.
https://es.wikipedia.org/wiki/Jakasios Los rusos, que vencieron a los arinios en 1608 y a los sagai en 1620, de manera que en 1708 son incorporados al Imperio ruso. Esto sirvió para acabar con las incursiones de los nobles mongoles y zúngaros. Durante el siglo XVIII el control sobre los jakasios se dividió entre los funcionarios de Krasnoyarsk y Kuznetsk. Con la introducción del estatuto de gobierno de los Pueblos Nativos de 1822, el estaturo Speranski,
https://www.google.com/search?q=patriarcas+de+la+iglesia+ortodoxa+rusa+en+el+siglo+XIX&sca_esv=0102a848e913b4a7&rlz=1C1SLLM_enMX1137MX1143&sxsrf=AHTn8zoNfjBsKhQvdm0yXXBHb7gwHNED2w%3A1744271362653&ei=Anj3Z9fPJ8_dwN4Pgan4qAc&ved=0ahUKEwjX2NmX_cyMAxXPLtAFHYEUHnUQ4dUDCBA&uact=5&oq=patriarcas+de+la+iglesia+ortodoxa+rusa+en+el+siglo+XIX&gs_lp=Egxnd3Mtd2l6LXNlcnAiNnBhdHJpYXJjYXMgZGUgbGEgaWdsZXNpYSBvcnRvZG94YSBydXNhIGVuIGVsIHNpZ2xvIFhJWEjpQ1C-A1ifPnADeAGQAQCYAbUBoAGYFqoBBDAuMjO4AQPIAQD4AQGYAhmgAqcXwgIKEAAYsAMY1gQYR8ICBhAAGBYYHsICCBAAGIAEGKIEwgIFECEYoAHCAgcQIRigARgKwgIEECEYFZgDAIgGAZAGCJIHBDMuMjKgB8pfsgcEMC4yMrgHiBc&sclient=gws-wiz-serp Entre 1721 y 1918, la Iglesia ortodoxa rusa fue administrada por el Santísimo Sínodo, en lugar de por un patriarca. Antecedentes. El primer Patriarca de Moscú fue el Metropolita Job en 1589. El Patriarcado de Moscú obtuvo el quinto lugar en el orden honorífico de las sedes orientales, después de los patriarcas de Constantinopla, Alejandría, Antioquía y Jerusalén. Pedro el Grande suprimió la institución del Patriarcado en 1721. Restablecimiento del Patriarcado. El Consejo de Comisarios del Pueblo (gobierno de los bolcheviques) restituyó el Patriarcado en Rusia en 1918. Patriarcas posteriores. Alejo II fue el 15. ° Patriarca de Moscú y toda Rusia. Fue elegido como Patriarca ocho meses antes de la disolución de la Unión Soviética. Kirill es el decimosexto patriarca de Moscú, actual cabeza la iglesia ortodoxa en “toda Rusia”.
https://www.google.com/search?q=origenes+de+vladivostok&sca_esv=7df6dcda83fa65f1&rlz=1C1SLLM_enMX1137MX1143&sxsrf=AHTn8zrPGg5fQeNVsl9tUL9iCHMlaZympQ%3A1744275411460&ei=04f3Z_buG-rep84P4rmF2AI&ved=0ahUKEwi2pKmijM2MAxVq78kDHeJcASsQ4dUDCBA&uact=5&oq=origenes+de+vladivostok&gs_lp=Egxnd3Mtd2l6LXNlcnAiF29yaWdlbmVzIGRlIHZsYWRpdm9zdG9rMggQIRigARjDBEiKKlCGCliVJXABeAGQAQCYAYwBoAH0DqoBBDEuMTa4AQPIAQD4AQGYAhCgAsUOwgIKEAAYsAMY1gQYR8ICBxAjGLACGCfCAgUQABjvBcICCBAAGIAEGKIEwgIKEAAYCBgKGA0YHsICCBAAGAgYDRgewgIIEAAYogQYiQXCAgYQABgHGB7CAggQABgFGAcYHsICChAAGAcYCBgKGB7CAggQABgHGAgYHsICBhAAGA0YHsICChAhGKABGMMEGAqYAwCIBgGQBgiSBwQxLjE1oAfnU7IHBDAuMTW4B7AO&sclient=gws-wiz-serp Vladivostok se fundó en 1860 como un puesto militar ruso en tierras recién conquistadas a China. Su nombre significa "Señor de Oriente" en ruso. Orígenes de la ciudad En 1858, la ciudad pasó de soberanía china al Imperio Ruso. En 1859, el conde Nikolái Muraviov-Amurski fundó un puesto naval en la región. En 1862, el puesto se convirtió oficialmente en puerto. En 1863, Vladivostok fue fundada definitivamente, aunque no alcanzó el estatus de ciudad hasta 1880. Importancia de la ciudad Su ubicación estratégica en el extremo sur del Lejano Oriente ruso la convirtió en un importante puerto y base naval. Es la terminal oriental del ferrocarril Transiberiano. Es la principal base naval de la flota rusa del Pacífico. Es un importante centro político y comercial de Rusia en el Lejano Oriente. Atractivos de la ciudad La fortaleza de Vladivostok La Catedral de San Nicolas El Puente del Cuerno de Oro El Arco del Triunfo del zárevich Nicolás El Acuario de Vladivostok Los invernaderos del Jardín Botánico
https://www.google.com/search?q=regreseo+de+los+jesuitas+a+mexico&rlz=1C1SLLM_enMX1137MX1143&oq=regreseo+de+los+jesuitas+a+mexico&gs_lcrp=EgZjaHJvbWUyBggAEEUYOTIICAEQABgNGB4yCggCEAAYgAQYogQyCggDEAAYgAQYogTSAQk3NzM3ajBqMTWoAgiwAgHxBXGthKfTQAXk&sourceid=chrome&ie=UTF-8 Regreso de los jesuitas. En 1814, el Papa Pío VII restauró la Compañía de Jesús en la Iglesia universal. En mayo de 1816, los jesuitas fueron restablecidos en México. Los jesuitas que regresaron a México se esforzaron en reactualizar su tradición e ideario.
https://es.wikipedia.org/wiki/Anexo:Episcopologio_de_Guadalajara Obispo de Guadalajara Diego de Aranda y Carpinteiro 11 de julio de 1836 al 8 -17 de marzo de 1853 y tenía a su cargo la población de Real de Asientos en Aguascalientes.
https://es.wikipedia.org/wiki/Sebasti%C3%A1n_de_Mil%C3%A1n San Sebastián o Sebastián de Milán (en latín: Sebastianus; Narbona, 256-Roma, 288) fue un tribuno militar del ejército romano, santo y mártir venerado por la Iglesia católica y la Iglesia ortodoxa que vivió en el siglo III.