La Celotipia es un trastorno del comportamiento sentimental humano que se caracteriza por celos más allá de lo común. Se presenta regularmente por querer poseer de manera exclusiva a la persona amada. El temor a su pérdida regularmente nubla el juicio racional de la persona. Se presenta entre hermanos, hijos y padres, y otras líneas familiares y no familiares, pero el objeto de este artículo es sobre la celotipia en la pareja.
Los celos son tan antiguos como el hombre y la mujer, la frecuencia es mayor 2 a 1 hombre mujer, sin embargo, esta incidencia es poco confiable dado que los celos femeninos son menos ¨públicos¨ que los masculinos.
Cuando en la consulta surgen los celos patológicos en una pareja regularmente son del esposo, y obedece a una inseguridad sobre sí mismo impresionante, regularmente se acompaña de otras alteraciones del comportamiento, como el “síndrome del cordón umbilical de acero” (no puedo dejar a mi mamita, desayuno diario con ella o una vez por semana), baja autoestima, impotencia sexual, eyaculación precoz y muchos otros relacionados.
En el caso de la mujer la celotipia está más bien ligada a baja autoestima e inseguridad que a otros trastornos de la personalidad. He tenido pacientes tan celosos que revisan genitalmente a su pareja a fin de probar que tuvo relaciones con otro hombre. Los investigadores privados en otros países como España, tienen entre muchos de sus clientes masculinos a celotípicos que, a pesar de ver las pruebas, siguen pensando que sus parejas les son infieles. Muy diferente historia cuando una esposa manda a investigar a su esposo probablemente infiel, que casi siempre resulta culpable.
Estimados lectores, los celos son parte del amor, pero todo tiene un límite, cuando se rebasa ese límite se destruye la pareja, crea resentimientos incurables en la persona celada, y de no detenerse puede acabar con la cordura del celoso. Así pues, tenemos 3 protagonistas, 2 reales y un ficticio. ¿Cómo saber si mi pareja o yo padecemos celotipia? Sugiero que se autoanalicen y analicen con la misma herramienta a su pareja, primero solos y luego juntos. Si cumplen cuando menos con una de estas características queridos lectores soliciten ayuda profesional:
1. Hay un tercer miembro imaginario en la relación de pareja (supuesto amante)
2. No, no puedo o no sé cómo controlar los celos porque no tengo conciencia de ello “No soy tan celoso(a)”.
3. Estoy permanentemente vigilante de situaciones cotidianas revisando objetos personales de mi pareja, llamadas telefónicas, mensajes de texto, celular, etc.
4. Interpreto hechos cotidianos de manera errónea, pero siempre relacionado a los celos, es decir, esta percepción e interpretación errónea busca siempre justificar una situación de infidelidad o engaño.
5. No puedo controlar mis impulsos, pensamientos, percepciones falsas que se le autoimpongo.
6. A mi pareja la sigo, pregunto por ella, la investigo, la reviso, la pruebo sexualmente “A ver cómo anda de energía”, etc.
En la situación de pareja los celos enfermizos o celotipia producen discusiones diarias ya que el otro se siente incómodo, no logra comprender del todo la situación generando impotencia y malestar, involucra a los hijos, padres, amigos, vecinos y todos los cercanos.
Como los alcohólicos, lo primero que debes hacer para superar el problema es darte cuenta y aceptar que lo tienes. Tú que lo padeces, es decir, que tu pareja está enferma de este trastorno, tolerarlo no ayuda, al contrario, lo hace más fuerte y peligroso, no son pocos los casos que acaban con violencia intrafamiliar severa que se pudo prevenir de atacarse a tiempo. Consulta ayuda profesional.
Brevemente tocaré el tema de Swingers, primero definirlo, y luego mencionar las reglas del “juego”. Los Swingers nacieron como tal en los años sesentas, aunque por supuesto el comportamiento es tan viejo como el hombre y la mujer. Nació más como una moda copiada de Europa que algo americano. Se trata simplemente de compartir a tu pareja sexualmente con otro(s) o con otra(s). Las reglas son simples:
1. Debe ser de común acuerdo.
2. No se pueden involucrar sentimientos, es sexo y nada más que sexo.
3. No puede ser unilateral, es decir ambos deben estar en la actividad simultáneamente.
4. Debe haber protección sanitaria.
5. No puede haber celos.
La práctica del Swinger por lo tanto no se considera Infidelidad.
En México hay diversos grupos de Swingers operando. El Voyerismo y los sueños eróticos personales de cada uno de nosotros, casi nunca nos abandonan. Un trío, ver sexo, que nos vean desnudos, que nos hagan cosas, todo eso está bien, todo lo que ambos en la pareja aceptemos está bien. En Sexualidad no hay bueno y malo. Amémonos unos a otros, es Bíblico. Sean felices, “La vida es muy corta”.
*Las opiniones contenidas en este artículo son responsabilidad del autor.