Para iniciar este artículo me gustaría hacer un par de preguntas a las mujeres que lo leen: ¿será la liberación sexual en la mujer cuestión de compulsión, intensidad como descarga sin contenido afectivo? O más bien ¿podemos hablar de una liberación entendida en un contexto de responsabilidad sobre su libertad vencer tabúes sobre el sexo particularmente en el matrimonio?
Les pregunto esto, porque actualmente pareciera que muchos hombres y mujeres utilizan la sexualidad como un desfogue y no como un medio de vinculación. Incluso hasta hace unas décadas, se creía que el hombre era el que tenía relaciones sexuales sin control, pero hoy, muchas mujeres tienen cada vez más citas de una vez y tienen relaciones, tienen una cita y hay relaciones sexuales.
Desde ésta perspectiva me parece que tenemos que entender desde dónde se plantea el término “liberación sexual” ya que depende de cada mujer y de cada hombre la forma en la que se puede entender el concepto. Siguiendo con éstas ideas, en otro artículo exponía lo siguiente:
… El rol de las mujeres en la sociedad y el trato que han heredado a lo largo de la historia en un mundo “dominado” por los hombres, ha sido objeto de mucho debate y análisis en las últimas décadas, incluso dio la pauta para el surgimiento del movimiento feminista el cual le ha dado una nueva perspectiva y dirección al tema.
Dicha corriente ideológica como se sabe pugnó por una igualdad de los derechos de las mujeres con los de los hombres y los cambios que se han alcanzado a través de este tipo de movimientos ha tenido un impacto significativo tanto en la pareja como en la sociedad, es decir, el rol masculino y femenino se han moldeado significativamente de tal forma que las conductas, las percepciones e ideologías hoy, afortunadamente son más evolucionadas.
La mujer se ha dado a la tarea de cambiar su papel teniendo una actitud distinta, por ejemplo, ante la sexualidad se muestra más abierta para buscar su placer, por lo que ahora ella puede tomar la iniciativa y buscar sexualmente al hombre, lo que a éste lo pone ante la conflictiva de siempre responder y con eficacia. También es libre de elegir un estilo de vida diferente al de su madre o su abuela al tener acceso a estudios de licenciatura, de maestría y hasta doctorado; puede optar por poder elegir combinar su lado personal con el profesional ejerciendo su profesión en el mercado laboral, dinámica que en otro momento era algo restringido o muy cuestionable y motivo de críticas y prejuicios por considerarlas osadas e irreverentes…
La cuestión que quiero plantear de fondo es que me parece que cuando se confunden conceptos, las buenas intenciones se pierden y se cae en un relativismo moral. La madurez emocional es un factor fundamental para poder alcanzar una liberación sexual en todo sentido, es decir, cuando una mujer se puede vivir a sí misma como tal esperando no solamente ser llenada de detalles, atenciones, cuidado, protección y seguridad por parte de su pareja, así como dejar atrás sus miedos inconscientes y tabúes acerca de la sexualidad per se, es cuando se podrá permitir en verdad explorarse, conocerse y entregarse en el terreno de la sexualidad.